Inundaciones obligan a conformar el Centro de Operaciones de Emergencia y se realizan defensivos para evitar nuevos desbordes del río Desaguadero. Hasta el momento son 5.375 personas afectadas por las riadas en la jurisdicción orureña.
Oruro, (EL DIARIO).- Oruro enfrenta el peor desastre como consecuencia de las intensas lluvias que se registran en la zona, especialmente por el desborde del río Desaguadero, cuyo caudal de aguas sigue en ascenso y está invadiendo lugares donde habían viviendas, animales y sembradíos.
Hasta ayer, se ha registrado un total de 5.375 personas damnificadas con las inundaciones, pero se advierte que esa cantidad puede seguir creciendo. En el Choro, el municipio más productivo en ganadería ovina del departamento de Oruro, se ha perdido el 100 por ciento de los forrajes para las ovejas. También se ha perdido los sembradíos de papa, quinua, cebada y otros.
El Municipio de Toledo, en cambio, registró 440 familias damnificadas. La pérdida de sembradíos fue estimada en 950 hectáreas de quinua, papa, kañawa. A esas poblaciones, empezaron a llegar raciones de alimento seco, pero el Comité de Operaciones de Emergencia (COE), que se organizó para atender los desastres, se olvidó del forraje.
El secretario general de la Gobernación de Oruro, Florencio Choque Lapaca, dijo que los miembros de COE están pidiendo al gobierno nacional “apoyo con forraje para los animales”. Por el momento, la alimentación está llegando para los comunarios de las regiones más afectadas por el desastre.
El director de Defensa Civil, coronel Rubén Camacho, dijo que se han movilizado cien efectivos militares para realizar trabajos de contención en algunos lugares del río Desaguadero, aunque el trabajo no es suficiente para controlar las aguas que, en gran cantidad, siguen bajando desde el Lago Titicaca.
Las casas de El Choro, Toledo, Challacollo, están rodeadas de agua. El ganado ha sido rescatado en parte, pero otras ovejas han muerto en el lugar, durante los tres últimos días. Los comunarios, en medio de lágrimas, explicaron que la ayuda es insuficiente para controlar el desborde del río, pero también criticaron la falta de previsión del Gobierno Autónomo Departamental de Oruro y de la ex Prefectura, porque “nunca se tomó en serio esta clase de desbordes que cada año se registran en el río Desaguadero”. Los defensivos debían ser construidos en esos lugares.
Los desbordes se registran especialmente en las zonas de Piruca, Tres Cruces, Huayllanco y Qasaya, según la inspección de autoridades y técnicos del Centro de Operaciones de Emergencia. La comisión entregó palas, yutes y botas, para “trabajar en forma conjunta, entre soldados y comunarios”, confirmó Camacho.
Dijo que el resultado de ese trabajo, se explicará todos los días a los medios de comunicación, luego de una evaluación de las tareas conjuntas. En la acción participa Cruz Roja Departamental, Bomberos, la Segunda División de Ejército, Policía y la Gobernación.
La Asamblea Legislativa Departamental de Oruro, luego de disponer la zona de desastre, autorizó a la Gobernación disponer todos los recursos necesarios, para la realización de tareas de emergencia, confirmó el asambleísta Eduardo Campos Velasco. “Este es el momento de demostrar la efectividad del trabajo, ante las emergencias”, dijo.
Las autoridades originarias de las comunidades de los municipios que se encuentran al lado del río Desaguadero afirmaron que se encuentran “totalmente aislados, ya que sus casas están en medio del agua, lo que obligó a emigrar a zonas altas, llevando su ganado, pero la mayor preocupación es la escasez de forraje. Para este año, no habrá forraje para los animales”.
El municipio de Machacamarca también pidió ayuda por temor al crecimiento de las aguas del Lago Poopó y el Lago UruUru, que están recibiendo la mayor cantidad de líquido, como consecuencia de las lluvias.
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