Los Agremiados han propuesto, justamente como una salida rápida que los clubes reenganchen a los jugadores que tenían contrato hasta el mes de diciembre del pasado año, pero tampoco tiene una respuesta al respecto por parte de la Liga y Federación Boliviana de Fútbol, si es que existe, en consecuencia de los clubes, ya que al final son ellos los que deciden, ya que durante los últimos días se arrojan la pelotita entre los mismos dirigentes.
Paniagua, sostiene que el problema creado por los dirigentes al cerrar el libro de pases, no es culpa de los futbolistas, por el contrario los dirigentes se equivocaron al firmar la medida y que simplemente exigen el derecho al trabajo