La producción de ‘Las Aventuras de Tintín’
SOBRE EL ESCENARIO PARA CAPTAR LA INTERPRETACIÓN
Se requirieron dos años de intensa investigación para la producción de Las Aventuras de Tintín, desarrollo, diseño, preproducción, elaboración de guión y conjunción de elenco, pero al fin llegó el momento de que los actores, realizadores cinematográficos y más de 200 miembros del equipo, convergieran para capturar la interpretación en Playa Vista Giant Studios, en California, e ingresar al mundo de Hergé. Aquí ocurrió la alquimia, mientras la emotiva interpretación de Jamie Bell, Andy Serkis, Daniel Craig y el elenco entero se registraba sincrónicamente y se transmografiaba en genuinas encarnaciones de las historias de tinta y acuarela de Hergé.
Una vez en el estudio, Spielberg innovó sin cesar para que la técnica de captura de la interpretación coincidiera con sus instintos como narrador de historias; también alentó a su equipo para idear soluciones nuevas ante los más complejos problemas visuales. Él y Peter Jackson iniciaron una minirevolución en el campo con un novedoso sistema, apodado cámara virtual, que permitió al director tener una relación más tradicional con los actores y comandar la película en el momento, todo ello mientras “veía” un mundo animado en 3D.
Al diferencia de lo que ocurre en un set convencional, la captura de la interpretación se desarrolla en lo que se llama un Volumen, un escenario vacío, en blanco y gris, que contiene hasta 100 cámaras montadas sobre un bastidor en el techo, capaz de captar una cobertura de 360 grados y suministrar estos datos en un espacio tridimensional. En el Volumen todos los actores (y toda la utilería y los adornos del set enmarcados en alambre), usaban puntos reflejantes recopilados por la cámara en menos de un sexagésimo de segundo, para ser trasladados a una película virtual 3D en movimiento.
Además, otras ocho cámaras de video de alta definición captaban las interpretaciones crudas mientras sucedían. Esto se usó después como referencia para los animadores, que se aseguraron de que cada gesto, sonrisa, estremecimiento y matiz emotivo en la interpretación de los actores, desde el miedo hasta la amistad, se transformara en creaciones digitales.
Operando la cámara virtual con un dispositivo un poco mayor que un controlador de videojuego y un monitor acoplado, Spielberg pudo caminar a través del Volumen y ver a los actores mientras interactuaban en el universo de la película en el monitor de la cámara virtual, para componer las tomas que deseaba en tiempo real. También los actores se veían a sí mismos en los monitores colocados a lo largo del estudio, lo cual les daba una retroalimentación instantánea.
Aunque la cámara virtual sólo ofrecía la calidad de imagen un poco más baja de un videojuego, fue suficiente para encender la creatividad de Spielberg; el director entendió la nueva técnica y pudo pintar con luz e imágenes de una forma que nunca había experimentado.
Un invento previo de Weta, el proceso llamado “captura de interpretación facial basada en imágenes”, usado para lograr el conmovedor realismo de Gollum en El Señor de los Anillos y crear los Pandorans de otro mundo en Avatar, de James Cameron, fue comandado por Spielberg para añadir ricas caracterizaciones a Las Aventuras de Tintín.
Con este sistema, los actores usan un casco parecido al de fútbol, equipado con una pequeña cámara dirigida directo a sus caras, lo cual permite un registro digital de los más leves movimientos expresivos de sus ojos, labios y músculos faciales. Para Spielberg esto puso el énfasis exacto donde lo deseaba: en el poder de la interpretación emocionalmente genuina.
DE LO VIRTUAL A LA REALIDAD
Una vez terminado el emotivo trabajo con los actores en el Volumen, el equipo de animación de Weta comenzó el proceso de 18 meses para refinar, esculpir y detallar cada una de las 1,240 tomas de la película, antes de trasladarlas al proceso de ejecución final. Aquí los realizadores cinematográficos pudieron jugar con los temas visuales, atmósferas cinematográficas y engañosos efectos de iluminación en cada escena individual, para perfeccionar el aspecto de la cinta.
Usando el estilizado mundo creado por Hergé como plantilla, los animadores trabajaron para dar vida al entorno de Tintín. Para Jamie Beard y Paul Story, supervisores de animación, éste fue el inicio de la creación del mundo animado para los personajes de Hergé. “El proceso de captura de la interpretación es apenas el primer paso para nosotros”, explica Beard. Como Jamie Bell, Andy Serkis y los otros actores no se parecen a sus personajes en un sentido literal, el equipo de animación dirigido por Beard y Story aplicó la interpretación captada en el escenario a los modelos de personajes digitales creados por el equipo Weta.