Piden mayores acciones en erradicación de coca

Los sembradíos de cocales superarían la producción necesaria para el consumo y otras actividades legales por lo que representantes del Gobierno deberán tomar las acciones necesarias para continuar con erradicaciones en el sector de La Asunta, dentro del marco del respeto de los derechos humanos, señaló el diputado por Convergencia Nacional (CN), Juan Luis Gantier.

Conforme a los trabajos que se realizan con la finalidad de continuar con el programa de lucha contra el narcotráfico que se va desempeñando durante los últimos años, el Gobierno habría iniciado erradicaciones de diversos campos cocaleros en la zona de La Asunta, motivo por el cual personas dedicadas a esta actividad habrían reaccionado recientemente de manera violenta contra los efectivos militares.

Por tanto, es un problema que tiene que ser resuelto de manera definitiva, en cumplimiento de las normas y con respeto a los derechos de las personas, expresó el diputado.

“Se tiene que cumplir lo que señalan nuestras normas, en condiciones de respeto, sobre todo de los derechos humanos que tiene que primar y que deberían ser las condiciones de estas acciones. Se debe hacer una erradicación, para cumplir con nuestras normas, sino el narcotráfico estará avasallando con lo que es nuestra vida social, económica, que ocasiona perjuicios”, acotó.

El miércoles, un grupo de pobladores de la región de La Asunta a 25 km de La Paz, determinó impedir el ingreso de los grupos de erradicación de la Fuerza de Tarea Conjunta. Similar situación se dio en el norte paceño en el mes de enero donde también se impidió que los efectivos militares cumplan su función de control de cultivos de hoja de coca.

Por su parte, el diputado de Unidad Nacional (UN) Jaime Navarro, expresó que el Gobierno sería el causante de este tipo de inconvenientes por realizar promulgaciones de leyes como la consulta previa, considerada extemporánea, que ocasionará la expansión de cultivos de hoja de coca en las reservas forestales del país.

Calificó como “lógica” la forma de actuar de los cocaleros de La Asunta, quienes se niegan a la erradicación de sus cocales, porque ellos no asimilan la erradicación de sus sembradíos, cuando se procede de manera distinta en el TIPNIS, donde se puede abrir las puertas a la expansión de cultivos mediante las normas que diseña el Gobierno central.