Bolívar vuelve con un punto que podría ser de oro

Sin pechos fríos

Por: Fernando Berdeja


Estuve muy tentado de repetir parte del editorial de ayer donde proponía el disfrutar un poco más el fútbol y no analizarlo y compararlo permanentemente con las gigantescas inversiones de los equipos que nos toca enfrentar, el placer que provoca el abrazar imposibles.

Con solo el respaldo de la tranquilidad de haber trabajado bien y la esperanza de sus seguidores se presentó Bolívar en Santiago. La previa fue más que interesante, sobre todo en las obligadas comparaciones que se efectúan desde la superficie y las estadísticas que siempre sirven para manejar tendencias.

Por ejemplo que la “U” Católica es un equipo top ten a nivel mundial ,que Bolivar en historia de Copa no conseguía buenos resultados hace mucho tiempo en territorio chileno, sumar los condenados once años que equipos Bolivianos no superan la primera fase, denotando que lógicamente el nivel presentado en las anteriores versiones fue muy bajo y que en el transcurrir del tiempo no pudo ningún equipo nacional elevar sus producciones.

Como se los propuse ayer, me acomodé para disfrutar, esperando cualquier situación y no terminé decepcionado. El espectáculo fue bueno, con altos picos de emotividad y lamentablemente con tres protagonistas, los locales, los celestes y el árbitro, creo que se le escapó el partido y gracias a los jugadores de ambos elencos pudo proseguir con su trabajo.

Sería extremadamente irrespetuoso si le dedicara más líneas en este sector al juez del encuentro, ya que desperdiciaría la oportunidad de contarles un poco las conclusiones que el partido me dejó.

Cero pechos fríos, todos corrieron y demostraron mucha personalidad, por eso terminaron los minutos finales atacando, desesperando al rival con un hombre menos, muy buena demostración de ductilidad, tras la expulsión de Flores y habiendo realizado dos cambios previos ingresando Lizzio y el conejo, cambiaron inmediatamente el dibujo y se notó aquí el trabajo del técnico ya que lógicamente el esquema se resintió pero rindió sus frutos hasta el final. Se armó un última línea de cuatro con un stopper, sumó sacrificio en el medio y la desesperación cundió en los locales. Quién maneja alternativas para su práctica inmediata dependiendo de la coyuntura demuestra inteligencia aparte de planificación y eso me quedó como resultado de la sumatoria de anoche.

El resultado fue bueno, la actitud, mejor, la salida de Flores complica en demasía el partido en La Paz, las amarillas como siempre pasarán su factura más adelante, pero desde cualquier punto de vista se ganó: un punto, respeto, confianza y autoestima.

ESA MALA COSTUMBRE

El volante de contención Wálter Flores cometió una vez más errores que se pagan caro, y fue expulsado a menos de 15 minutos del final dejando que su equipo camine al filo de la navaja y redoble esfuerzos para mantener el empate.

El temperamental mediocampista vio la primera tarjeta amarilla a los 8 minutos del partido en una jugada en la que la falta era innecesaria, porque trabó al atacante lejos de la zona de peligro.

En la segunda amarilla repitió esa falta desesperado porque el atacante chileno le ganó en el mano a mano, en una acción en la que incurre siempre en el campeonato local y en todas sus presentaciones.

Aunque en beneficio del jugador habrá que señalar que quedaba muy solo en la contención porque el argentino Lucas Scaglia, que tenía la tarea del relevo no cumplió con esa labor demostrando que no es un volante de contención.

 
Revistas
Publicidad
Portada de HOY

JPG (775 Kb)      |       PDF (233 Kb)



Cotizaciones
1 Dólar:6.96 Bs.
1 Euro:9.12 Bs.
1 UFV:1.73190 Bs.

Publicidad