La Academia empezó con pie derecho su participación en la Copa Libertadores luego de empatar 1-1 con Universidad Católica en el estadio San Carlos de Apoquindo.
El gol boliviano merece un recuadro particular por la rapidez, precisión y sincronización, que culminó con el remate de Ferreira. El local empató en una jugada de contragolpe en la que el árbitro ignoró una falta a favor del equipo boliviano.
Con un hombre menos en el terreno, luego de la expulsión de Walter Flores a los 25 minutos del complemento, Bolívar fue la expresión del equipo ordenado, que en ningún momento se fue atrás y nunca renunció a la posibilidad de ganar el encuentro. Ahora tiene un panorama celeste al frente en este torneo.