Los panificadores “abren el paraguas” con anticipación ante una posible elevación del precio de la unidad del pan a 0.50 centavos, debido al incumplimiento del Gobierno al convenio suscrito el año pasado.
Emapa debía entregar azúcar y harina a precios preferenciales a los panificadores, pero no ha cumplido con parte de esas entregas, provocando el descontento de los que día a día elaboran el pan de batalla.
Por su lado, el presidente de la Federación de Juntas Vecinales de La Paz, Arturo Quispe, se alineó con el Gobierno y echó la culpa a los panificadores por crear un clima de tensión ya que el pan es el producto base en la canasta familiar.
El economista Armando Méndez es partidario de suspender las subvenciones, de manera que el precio de este producto se debería regular en el mercado en la balanza de la oferta y la demanda.