Una semana complicada

El primer micro ciclo de la selección boliviana fue bastante irregular, debido al mal clima que hubo en la ciudad de La Paz, sin tomar en cuenta la falta de canchas.

El lunes 13 de febrero, la verde comenzó su concentración en el Hotel Andino de la zona de Mecapaca, lugar donde sólo ocho de los 23 jugadores convocados llegaron, debido a que días previos se jugó una fecha del torneo liguero.

Con ocho jugadores el técnico de la verde no pudo hacer mucho y por ello sólo realizaron un trabajo regenerativo. Al día siguiente llegaron casi todos los convocados, donde sólo faltaba el volante de Aurora, Jaime Robles, quién llegó al finalizar la tarde.

Quinteros con plantel casi completo no pudo tener un entrenamiento normal, ya que ese día llovió bastante, imposibilitando la práctica en una cancha al aire libre, por ello decidieron entrenar en el Coliseo Don Bosco, lugar donde tuvieron una sesión física.

Ese mismo día toda la delegación nacional cambió su centro de concentración y se dirigieron al Hotel Europa, ya que el clima no les permitía realizar un buen entrenamiento y Mecapaca era bastante lejos para buscar una cancha en el centro paceño. El miércoles 15, ya con todos los convocados, Quinteros entrenó en la cancha Zapata. Esta fue la primera práctica de la semana en una cancha de césped, por ello el estratega nacional aprovechó al máximo este entrenamiento, ya que el clima les favoreció ese día. Al finalizar, Cuerpo Técnico y jugadores, fueron al estadio Hernando Siles a ver el debut de The Strongest en la Copa Libertadores de América frente al Santos de Brasil.

Al siguiente día los dirigidos por Quinteros entrenaron en el Campo Deportivo Obrero, de la zona de Miraflores, lugar donde se trabajó la parte técnico-táctico.

Los últimos dos días, viernes y sábado, también se entrenaron en el campo de Miraflores y se realizó algo de fútbol, donde Quinteros indicó que pese al mal clima esta semana fue muy productiva.