Las riadas dejaron incomunicada a Bolpebra hasta donde se puede llegar sólo apelando a la carretera del sector brasileño. Cobija sufrió la inundación de cinco de sus barrios que se encuentran cerca al río Acre y la ayuda de Defensa Civil sólo mitigó las necesidades de los damnificados que podrían llegar a las 700 u 800 familias.
Con el agua hasta el pecho y la congoja contenida por el momento que viven, decenas de familias cumplían ayer el trabajo colectivo del recojo de sus pertenencias, mientras las autoridades, a través de diversas organizaciones intentaba agilizar la asistencia.
El gobernador de Pando, Luis Adolfo Flores Roberts, declaró zona de emergencia tras hacer una evaluación de las necesidades de diversas poblaciones a consecuencia del desborde del río Acre.
Los barrios Matajo, Puerto Alto, Cataratas, Santa Cecilia y Villa Montes fueron los más afectados, en especial el primero que, prácticamente desapareció. Los damnificados fueron ubicados en tinglados, carpas y en algunos campos deportivos, lamentando la pérdida de sus bienes.