Más poblaciones en riesgo de inundación en Pando y Beni

Cobija.- La crecida de los ríos Beni, Orthon, Itonama, Yacuma, Ibares, Iténez y Mamoré en tierras benianas, y el Orthon y Tahuamano en el sector pandino amenazan con inundar 14 poblaciones, de acuerdo a los informes del Servicio Nacional de Hidrografía Naval.

El descenso de estas aguas de las partes altas afectará a estas regiones. El río Beni afectó a 80 familias en Rurrenabaque, las que fueron trasladadas a partes más altas, en previsión a la crecida de estas aguas. Los habitantes de la población de San Marcos son los más afectados.

El alcalde de Rurrenabaque, Yerko Núñez, indicó que en la medida de sus posibilidades se atendió a los afectados entregándoles, vituallas, medicamentos y alimentos, pero se corre el riesgo de que el número de afectados crezca.

Entretanto, el viceministro de Defensa Civil Óscar Cabrera, anunció que se hace un seguimiento de todos los casos y se atiende con la ayuda humanitaria a los afectados. Para tal efecto, ayer en horas de la mañana se envío a Cobija otros dos aviones con colchonetas y cargas y se esperaba la llegada de otros dos aviones con víveres.

“Tenemos 1.700 toneladas de alimentos y hasta el momento se han distribuido 700 toneladas. Todo está bien almacenado y disponemos de los medios de transporte necesarios para llegar a los lugares afectados. Es casi seguro que se declare emergencia nacional”, expresó Cabrera.

La autoridad expresó que el presidente Morales ordenó que se atendiera inmediatamente a las poblaciones damnificadas y preservar la vida de los habitantes de esa región.

Mientras el Primer Mandatario viajó al Chapare para pasar el martes de ch’alla en Villa 14 de Septiembre, delegó al vicepresidente Álvaro García, la tarea de atender personalmente a los damnificados en Cobija.

En tanto, en Cobija proseguía la tarea de los afectados para recuperar sus bienes, ingresando a sus domicilios por los techos y ventanas. A lo largo del día y entrada las primeras sombras de la noche, las barcazas trasladaban muebles y artículos electrodomésticos a las partes altas.

El corte de energía eléctrica en la zona y el miedo a las enfermedades por la carencia de agua potable en una parte de Cobija son ahora los desafíos a enfrentar, mientras se descartó el retorno de los estudiantes a las labores escolares.

Las aguas turbias recibieron durante el día los rayos solares, mientras muchos de los habitantes permanecían con la única ropa que salvaron desde la riada. Las noticias de que en el sector brasileño de Brasilea las aguas llegaron hasta los tres metros muestran la magnitud de este desborde.

Aunque el Gobierno atiende con prioridad a los damnificados de Bolpebra y Cobija, ahora aparecen como otros frentes en peligro las poblaciones de Villa Bella y Cachuela Esperanza, además de Riberalta, debido a la crecida de las aguas del río Orthon, mientras el río Iténez amenaza a la localidad de Orquillas.

Desde Trinidad, se informó que estas crecidas de los ríos pueden afectar a varias poblaciones que se asientan en las riberas tal el caso de Santa Ana, muy cercano al Yacuma; el Ibare hace temer a los trinitarios, aunque el peligro más cercano para la capital beniana es el caudal del río Mamoré.