El presidente Evo Morales estuvo ayer en Cobija, donde entregó dos purificadores de agua destinados a los barrios deprimidos de esa ciudad que sufrió hace una semana la riada que dejó sin los servicios básicos al menos a cinco barrios cercanos al río Acre. Aprovechó la ocasión para pedir a los dirigentes barriales y las comunidades a manejarse con transparencia.
Además, anunció que junto a la Gobernación y la Alcaldía financiará la construcción de viviendas para quienes quedaron sin hogar luego del desborde del río Acre que dejó sin vivienda a cinco barrios de esta ciudad.
“Hay que garantizar un nuevo terreno en partes más altas y, previamente, necesitamos al menos un mes de planificación. Seguramente serán 20 a 25 viviendas. Es probable que lo propio hagamos en Bolpebra”, expresó.
Tuvo palabras de agradecimiento para quienes desde el exterior ofrecieron ayuda para llegar a los damnificados y para las entidades y departamentos del país que iniciaron campañas solidarias.
Sostuvo que destinará siete millones de dólares para la dotación de agua potable en Cobija, un anuncio que fue aplaudido por los concurrentes a la concentración, de esta manera el Presidente despeja algunas dudas sobre su actitud de preferir quedarse en el Chapare y delegar la tarea de asistencia a sus colaboradores en los días críticos.