(ANF).- El Gobierno central dispuso la ejecución de un Plan Inmediato de remediación con destino a las 10.000 familias damnificadas en ocho departamentos del país y que se encuentran en 61 municipios, tomando en cuenta las características que tienen tanto el Altiplano como el Oriente nacional.
En conferencia de prensa, el viceministro de Desarrollo Rural y Agropecuario, Víctor Hugo Vásquez, dio cuenta que en todo el territorio nacional se trata de 10 mil familias afectadas en 61 municipios de ocho departamentos.
De acuerdo con los datos disponibles, son 8.856 hectáreas de superficie afectada, de los cuales el departamento de Chuquisaca es el más afectado con 3.600; mientras que Oruro ocupa un segundo lugar con 2.100 hectáreas; La Paz en tercer lugar con 1.100 hectáreas afectadas. Sucesivamente los otros departamentos.
Alrededor de 21 productos fueron los más afectados como los cultivos de maíz en grano, papa, quinua, trigo, haba, alfalfa y frutales entre otros productos.
“Queremos decirle a la población, a quienes han sido afectados, que no están solos. El Gobierno está a su lado y, en ese marco, estamos trabajando para rehabilitar sus cultivos, de acuerdo al ciclo agrícola de cada región”, afirmó la autoridad de Estado.
Agregó que “el producto que más fue afectado es el maíz, si lo comparamos con el total de la siembra (de este producto) este representa el 0,9 por ciento, lo que no es significativo, porque en todo el país se siembra alrededor de 347.000 hectáreas, por tanto esta afectación es mínima”.
Esa ayuda tiene en cuenta el Decreto Supremo 1145 por el que se habilita tanto a los gobiernos municipales como departamentales utilizar los recursos económicos necesarios de acuerdo a las características de cada región y que están inscritos en el Presupuesto General del Estado 2012.
Al mismo tiempo trabajarán con recursos de donación del Fondo de las Naciones Unidas para la Alimentación (FAO, por su sigla en inglés) de 14 millones de bolivianos que también permitirá rehabilitar las cosechas agrícolas.
Esa ayuda busca reponer semillas, fertilizantes y otros insumos agrícolas que se requieran para este efecto.
Vásquez dijo que en el mediano y largo plazo, se procederá a la construcción de camellones en el departamento del Beni, que se inició en 2011 y proseguirá en la presente gestión “como una solución de carácter estructural”.
Mientras que en el caso del departamento de Santa Cruz se trabaja en el tema de muros de contención que permite la habilitación de nuevas hectáreas de cultivos en beneficio de los productores.
En el caso del Altiplano las semillas forrajeras y el tema de micro riego permitirá minimizar los efectos del cambio climático. En este caso, puntualizó que la ayuda se dotará a partir de septiembre a octubre, “porque se trata de las fechas en las cuales se inicia la época de siembra”.
En los departamentos ubicados en la parte oriental, algunas regiones tienen doble cosecha y la ayuda se concretará a finales de marzo e inicios de abril.
Vásquez mencionó que en el caso boliviano son cuatro los efectos del cambio climático: las heladas, la sequía, la granizada y de las inundaciones, que representan el 45% de riesgos presentes en Bolivia.
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