Jesús saltó de alegría

Pero lo que estamos hablando no tendría sentido si no supiera por qué Jesús reaccionó de esta forma. Te sorprenderás como yo también me sorprendí, por lo dicho por Jesús mismo.

Leamos: “En aquella misma hora Jesús se regocijó en el Espíritu, y dijo: Yo te alabo, oh Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque escondiste estas cosas de los sabios y entendidos, y las has revelado a los niños, sí, Padre, porque así te agradó”. Lucas 10:21.

¿De qué cosas estaba hablando Jesús?, ¿qué le causaba esa alegría tan grande que saltó?, así como tú saltarías de alegría si te regalaran un auto o un pasaje al exterior con todo pagado, tanta alegría sería notoria y puedes pegar un salto casi hasta el techo. Jesús, si entiendes, “no saltó de alegría porque le dieron algo”, sino por las cosas que su Padre celestial nos dio a los que creemos en él, como dijeron los 70 que volvieron diciendo: “Señor, aun los demonios se nos sujetan en tu nombre”. Lucas 10:17b.

Por eso fue su reacción, pero sigue diciendo todavía: “Porque escondiste estas cosas de los sabios y entendidos, y las has revelado a los niños”. Lucas 10:21b.

Tal vez te preguntarás ¿a quiénes se refiere diciendo “a los niños?” no es a lo que conocemos como niños, menores de edad. No, sino a quienes en la Biblia menciona:

“De cierto os digo, que el que no reciba el reino de Dios como un niño, no entrará en él”. Marcos 10:15.

Es muy importante entender lo que dice la Biblia, que “el que no reciba el reino de Dios como un niño”… Los niños no cuestionan las cosas de Dios, sino, por el contrario, las creen más que cualquier otra persona, así deberíamos recibir su reino, como niños, es por esto que él saltó de alegría, cuando envió a los 12 y después a los 70, con esas instrucciones.

“Y yendo, predicad, diciendo: El reino de los cielos se ha acercado. Sanad enfermos, limpiad leprosos, resucitad muertos, echad fuera demonios; de gracia recibisteis, dad de gracia”. Mateo 10:7-8.

Ahora entiendes por qué Jesús se regocijó o exultó o saltó de alegría y alabó a su Padre, si tú creyeras así como niño y verías las cosas que Dios está haciendo por medio de aquellas personas que creen y tienen fe en Jesucristo, también te regocijarías o exultarías o saltarías de alegría porque no podrás detener el gozo que tienes. Ahora que conoces lo que hacía el Señor Jesús, aprende de él y que Dios te bendiga hoy, mañana y siempre.

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