Roma, (EFE).- El volcán Etna, en la isla italiana de Sicilia, entró ayer en erupción en el cuarto episodio de este tipo que se registra en 2012, y expulsó una columna de cenizas que alcanzó entre los 6.000 y los 7.000 metros sobre el nivel del mar.
Durante la madrugada se registraron las primeras señales de actividad del Etna -la montaña más alta de Italia, en el sur de la cordillera de los Alpes, con 3.322 metros de altura- que registró un episodio eruptivo a partir de las 8.00 horas (06.00 GMT). La erupción tuvo lugar en un cráter muy activo del sureste del volcán y la lava avanzó por la ladera del Valle del Bove, una zona desértica, mientras el viento ha hecho que la nube de cenizas se desplazara hacia el este.
Por el momento esta nueva erupción no ha comportado alteraciones en la actividad del aeropuerto de Catania, próximo al volcán, aunque se ha previsto la posibilidad de variar algunas rutas si fuera necesario, informaron los medios de comunicación italianos.