Macrófitas invaden el 90% de laguna Alalay

Cochabamba, (EL DIARIO).- Más del 90% de la superficie de la laguna de Alalay, en las últimas semanas, quedó invadida por miles de macrófitas, debido a la presencia de elementos tóxicos y residuos químicos en el agua.

Las macrófitas, son plantas muy potentes biológicamente, que absorben los contaminantes residentes en el agua.

Desde las últimas semanas los elevados niveles de contaminación, ocasionaron la proliferación de estas plantas acuáticas, también denominadas repollitos de agua.

“Las partículas tóxicas están haciendo su efecto en las macrófitas que precisamente se alimentan de estos residuos y nutrientes excesivos que vienen de las aguas contaminadas y es por eso la gran cantidad, se proliferan de manera muy rápida y prácticamente de forma manual no vamos a poder extraerlas en su totalidad”, explicó, el director de la Madre Tierra de la Alcaldía, Germán Parrilla.

El Titular de esta unidad, pidió al Concejo Municipal, declarar de manera inmediata estado de emergencia en el lugar, para poder contar con mayor ayuda y un presupuesto económico que permita la recuperación y mantenimiento sostenido de la Laguna de Alalay, la cual en los últimos meses, quedó en el olvido e indiferencia de las autoridades.

CAUSAS

Por su parte, el Concejal David Herrada, explicó que la contaminación que afecta a las aguas de la Laguna, responde a la ruptura de sistemas de alcantarilla clandestinos, y residuos de elementos químicos de fábricas de jeans, que funcionan en cercanías del lugar, siendo necesario en su criterio, la clausura de las mismas.

Asimismo, la concejal Ninoska Lazarte, señaló que todas las instituciones y autoridades deben unir esfuerzos para implementar un proyecto que no sólo permita la recuperación del lugar, sino fomente el turismo y esparcimiento familiar, iniciativa que debe ser concretada desde el ejecutivo municipal.

Mientras se espera la ayuda, unas 100 personas de manera manual, trabajan todos los días en la extracción de macrófitas, que ahora pasó a ser una especia de zona pantanosa, donde gran cantidad de peces y aves murieron debido a la concentración de tóxicos en la laguna Alalay.

OPINIÓN

Néstor Aguirre, Doctor en Ciencias Naturales e integrante del grupo de investigación en gestión y modelación ambiental – GAIA – de la Universidad de Antioquia, explica que, lo primero que se debe hacer a la hora de pensar en tratar aguas residuales con este tipo de plantas, es estudiar el estado y las condiciones del agua, así como los contaminantes presentes en ella, para saber cuál es el tipo de intervención (física, química, biológica) y planta (pistia stratriotes y egeria densa, eichhornia crassipes, entre otras) más adecuada para limpiarla.

Aguirre indica que este proceso biológico depende del tipo de planta, debido a que unas absorben más que otras, según el tipo de contaminante, profundidad y condición del lugar donde están las aguas. Pero la conclusión más importante, fue que dos tipos de las macrófitas acuáticas, pistia stratriotes y egeria densa, se pueden usar en el tratamiento de aguas residuales. Este descubrimiento, podría beneficiar a pequeñas comunidades de nuestro país.

Falta por resolver qué hacer con las plantas que ya están saturadas de tomar contaminantes y son removidas. Por el momento lo que se hace es incinerarlas, quemar las muestras “pero esos incineradores deben tener filtros que eviten la transferencia de contaminantes a la atmósfera. Luego, ese material se convierte en un sólido en ceniza y esas cenizas se pueden incluir en una cadena de recuperación”, señala Aguirre.

También se aprovechan, dependiendo del contaminante absorbido, en la dieta del ganado vacuno y para abonar el suelo.