Sangre de fútbol corre por sus venas

Es un muchacho como muchos que juegan al fútbol, aprendió de este oficio en la calle, con los amigos en el barrio. Es un “empírico” del fútbol, no tuvo una preparación en este deporte como varios de sus compañeros; sin embargo, no fue un impedimento para convertirse hoy por hoy, en uno de los mejores defensores de nuestro país, firme candidato a estar en la selección los siguientes partidos de eliminatorias.

¿Cómo fue la niñez de Edemir Rodríguez?

En mi familia somos seis hombres y tres mujeres (de hermanos), somos una familia muy grande, muy unida. Cuando nos reunimos siempre charlamos, recordamos las travesuras que hacíamos de niños.

¿Cómo empezaste con esta fiebre del fútbol?

De niño siempre jugaba con los amigos en la calle del barrio, no tuve la oportunidad de ir a una escuela (de fútbol), todo fue muy rápido.

¿Cómo saltaste al fútbol profesional?

Antes del fútbol, hacía atletismo, corriendo 100 m. de velocidad. Después me metieron a jugar en un campeonato provincial que se juega en la zona, un empresario me vio jugar y me dio la oportunidad de pagarme todo para salir de mi pueblo. Me llevó a Oruro y no se dio la oportunidad, me fui a Sucre para jugar en Independiente que estaba en su último año en la Liga y tampoco hubo suerte. Para no volver a mi pueblo, me quedé a jugar en Fancesa ese año (2005) en la asociación (de Sucre). Al año siguiente fui a Potosí donde me dieron la oportunidad de jugar.

Tus padres orgullosos de tu carrera.

Aunque no lo demuestren mucho, uno sabe que en el fondo sí lo están, mis hermanos me cuentan que siempre están pegados a la radio o a la tele cuando juego. La última vez que estuvieron acá, llevamos a mi papá al estadio, era la primera vez que iba a un estadio y era la primera vez que mi mamá me veía jugar. Me sorprendió que mi mamá fuera (en el partido con San José), porque ni en el pueblo lo hizo, y yo le decía a mi señora que estaba nervioso por eso. Mi papá fue a verme al partido con Unión Española y mi señora me contó que estaba feliz por el gol que hice y después estaba molesto por la derrota, como cualquier hincha que ve a su equipo perder.

En Bolívar, ¿estás viviendo tu mejor momento futbolístico?

Sí. Estoy recuperando el nivel que tenía en Real Potosí, me estoy dando cuenta que estoy mejorando en muchas cosas, gracias al trabajo día a día y al técnico que tiene mucha paciencia para enseñarnos lo que sabe.

¿Cómo llegaste a Bolívar?

Tengo contrato con Real Potosí hasta el 2014, era hasta el 2012, para venir acá (a La Paz) tuve que firmar dos años más allá, tenía que hacer de todo para no desperdiciar esa gran oportunidad y poder estar acá ahora, feliz.

¿Te entiendes bien con Gabriel Valverde y Pablo Frontini en esa defensa?

Cada partido que pasa nos estamos entendiendo mejor, con Lorgio (Álvarez) y Abdón (Reyes) también cuando jugamos con línea de cuatro, estamos más solventes, tratando de no cometer los mismos errores, partido a partido vamos mejorando.

¿Cómo ves al grupo?

Impresionante, es un grupo bien unido, en los momentos difíciles se une más. Estoy muy contento con la calidad humana que impera, cuando te equivocas siempre están todos para ayudarte, eso es muy importante para que el equipo sea más fuerte y mejorar cada día.

¿Con quiénes tienes una mejor relación en el equipo?

En realidad nos llevamos bien con todos. Pero uno siempre tiene más afinidad con algunos (compañeros), con Walter (Flores) que es con él que concentro, con Damir (Miranda), con Ronald (Eguino), y también con Gabriel (Valverde), que son con quienes siempre ando.

En junio termina tu contrato con la Academia, ¿quieres quedarte acá?

La verdad que sí, es un equipo que te da todas las comodidades para poder trabajar, en lo único que uno tiene que preocuparse es en entrenar cada día mejor y y darle todo tu rendimiento al club.

¿Te ilusiona jugar en el exterior?

Uno sueña, uno quiere jugar afuera, me gustaría salir (al exterior). Pero eso se logra con rendimiento, y con trabajo cada día. Cuando se trabaja día a día siempre habrá más oportunidades.

¿La selección?

Uno trabaja siempre con la mentalidad de estar; quiero ser titular en la selección, que es lo que me falta, para ello estoy trabajando, en Junio hay una gran oportunidad y esperemos estar entre los once del equipo.

Ante la lesión de Ronald Raldes, aumentan las posibilidades.

Desgraciadamente, el capitán de la selección tuvo una lesión grave, esperemos que se recupere pronto porque es un referente ahí atrás, y uno que lo viene siguiendo de mucho tiempo, aprende cosas de él. Si se da la oportunidad de reemplazarlo, esperemos estar a la altura de su rendimiento.

¿A qué jugador o jugadores admiras en el exterior?

Admiro mucho a John Terry (defensor del Chelsea), cada vez que juega lo veo. Y ahora que estoy jugando más de lateral, trato de ver a quienes se desenvuelven en esa función y aprender más, siempre veo a Dani Alves (Barcelona), a Bosingwa, que es otro de los jugadores del Chelsea que me gusta. Siempre admire mucho a Cafu, por la edad que tiene, como podía subir y bajar gracias a la preparación que tiene.

¿Y equipos?

Me gusta el Flamengo en el fútbol brasileño, en Argentina San Lorenzo y en Europa el Chelsea (de Inglaterra).

¿Qué otros deportes practicas, o te gustaría practicar?

Me gusta ir a pescar, bastante. También me gusta estar en el campo, ir a jugar fútbol con los amigos. El deseo que tengo es jugar tenis, nunca lo he hecho, porque no tuve la oportunidad y tampoco tengo mucho tiempo; me gusta ver el tenis.

Con Bolívar están a punto de hacer historia con una clasificación en la Copa Libertadores.

Tenemos esa gran oportunidad, dependemos de nosotros, después del tropiezo que tuvimos aquí con Unión Española sabíamos que podíamos ganar afuera, gracias a Dios nos trajimos la victoria de Colombia y con el triunfo que obtuvimos acá, dependemos de nosotros mismos para poder clasificar.

¿Cuán importante es el apoyo de la familia en la vida de un futbolista?

La familia siempre es importante, siempre están en los momentos más difíciles. Cuando uno llega a la casa desanimado y ve las sonrisas de estas niñas (sus tres hijas), te devuelven la alegría, y el apoyo de la esposa siempre ha sido importante, porque te entiende cuando estás mal, sabe cuando estás mal o cuando estás bien. Es la única que se da cuenta de mi estado de ánimo.

Ronald Jimenez