Gobernador insiste en militarización de zona limítrofe Oruro-Potosí

Oruro, 31 (EL DIARIO).- El gobernador de Oruro, Santos Tito Veliz, pidió al gobierno del presidente Evo Morales, la militarización de la zona limítrofe entre los departamentos de Oruro y Potosí, para mantener la paz en la región, especialmente en esta época de cosecha de quinua, cuyo costo adquiere importancia, cuando el quintal se cotiza en 700 bolivianos a nivel internacional.

La solicitud fue transmitida a los ministros de Defensa, Gobierno y Autonomías, en el sector de mayor conflicto, donde se encuentran las poblaciones orureñas de Challuma, Rodeo, Quillacas, Cajuata, que están al frente de la población potosina de Coroma.

El mismo pedido fue transmitido hace tiempo, cuando se suscitaron los primeros conflictos, pero las autoridades del gobierno nacional han preferido enviar policías, para mantener la paz, ya que “no se puede militarizar la zona, porque Oruro y Potosí no son repúblicas independientes, sino forman parte de Bolivia”.

Sin embargo, el gobernador Tito reiteró el pedido, para que los comunarios se sientan más tranquilos con la presencia militar. Similar pedido fue hecho por el gobernador de Potosí, Felix Gonzáles.

En el sector de Rodeo existen 50 hectáreas de quinua, que están listas para la cosecha, pero los campesinos temen un nuevo enfrentamiento, cuando se inicie este trabajo. Por ese motivo, las autoridades originarias, a través de los municipios de Quillacas, Salinas de Garci Mendoza y Pampa Aullagas, pidieron la presencia militar, antes que exista enfrentamiento con los comunarios de Coroma, que también quieren ingresar al territorio orureño, para hacer el mismo trabajo.

El gobernador dijo que de una hectárea de sembradío de quinua, “se cosecha entre 15 y 20 quintales. De las 50 hectáreas, se podría cosechar mil quintales de quinua y, de acuerdo al mercado nacional e internacional, este producto tendría un costo de 700 bolivianos por quintal, pero sumando todo, se haría un total de 700 mil bolivianos”.

Santos Tito planteó que, ante este panorama, no hay otra alternativa que buscar la presencia del ejército, para que se haga cargo de la cosecha y el producto vaya en beneficio de los hogares de niños o ancianos de ambos departamentos.

“Como departamento de Oruro realizaremos todas las acciones de una férrea defensa del territorio en base a los documentos históricos ancestrales que se tienen, y en base a la nueva Ley de Unidades Territoriales”, dijo.

Por su parte, el comandante de la Segunda División del Ejército, coronel Juan Carlos Massi, dijo que no tienen ninguna instrucción para ir a la zona de conflicto, pero si las autoridades superiores disponen una medida de esa naturaleza, “nosotros cumpliremos esa tarea”.

“Estamos esperando esa instrucción”, dijo, en una escueta declaración efectuada por esa autoridad.