La azaña de Carrasco en el desierto de Atacama durante la guerra de 1879

Por Antenor Fernández Yañez.

En la madrugada del 6 de diciembre de 1879, la Caballería Chicheña de 70 Rifleros Francotiradores, al mando del Cnl. Rufino Carrasco, derrotó a una fracción del ejercito chileno en el desfiladero de Tambillo (Atacama), constituyéndose, en el único triunfo de las armas bolivianas hace 133 años durante la Guerra del Pacífico.

Los chilenos, enterados de la presencia de un contingente boliviano que avanzaba hacia Calama, tomaron posiciones en un estratégico cañadón en altos parapetos en táctica de emboscada.

La columna de patriotas bolivianos, descendió con precaución por una estrecha quebrada, de pronto, al promediar la una de la madrugada, el silencio del desierto se irrumpió con el atronador estruendo de armas de fuego, proveniente de las laderas del cañadón, los proyectiles del enemigo se concentraron sobre los primeros jinetes del grupo boliviano.

Cinco proyectiles, dieron de lleno en el cuerpo del Tte. Desario Alfaro quién cayó mortalmente herido, similar destino corrió el Sgto. Juan de La Cruz Calera, oriundos de Suipacha y Estarca, respectivamente.

En tanto que el Sbtte. Ernesto Carrasco, natural de Talina, resultó con una herida de bala en el brazo, resultando muerto el caballo del My. Ayaviri, oriundo de Tatasi.

12 CHILENOS ABATIDOS EN EL COMBATE

En medio de relinchos, gritos de alerta y el intenso tiroteo de las laderas, los francotiradores bolivianos entrenados para el combate en todo tipo de terreno, desmontaron de sus caballos, tomaron posiciones detrás de las rocas y respondieron con precisión el ataque con nutrido fuego de fusilería ocasionando l2 muertos en el bando enemigo.

Ante la contundente respuesta de los bolivianos, el comandante chileno Toro, ordenó la retirada de sus efectivos, quienes optaron por huir del cañadón en forma desordenada.

El enfrentamiento, fue favorable al Escuadrón Boliviano, fueron tomados 11 prisioneros, se verificó varios heridos, por las manchas de sangre en las rocas, se requisó 18 rifles “Winchester”, 14 espadas, 10 caballos ensillados, equipo logístico diverso, vestuario y cajones de munición de diverso calibre.

Dos meritorios chicheños: Alfaro y de la Cruz Calera, héroes bolivianos, regaron con su sangre el bendito suelo patrio, en la inmensidad del desierto de Atacama, nuestro Litoral cautivo, valioso en recursos mineros (el más grande yacimiento de cobre del mundo), desde 1879 en poder del usurpador chileno.

La historiadora tupiceña, Martha Dora Salazar Burgos, en su libro “Reseña Histórica de la Provincia Sud Chichas”, (2002), rememora esta página dorada protagonizada por el bravo talineño Rufino Carrasco y sus legendarios francotiradores que estuvieron muy cerca de retomar el puerto boliviano de Mejillones, en caso de haber recibido oportuno refuerzo, que les fue negado desde el Comando Militar de Potosí.

GLORIOSA CABALLERIA CHICHEÑA

La revista Nuevos Horizontes de EL DIARIO, en este segundo capítulo referido al Combate de Tambillo (1879), se permite entregar a sus lectores la nómina y origen de los bravos combatientes, héroes bolivianos desplegados al teatro de operaciones militares para recuperar el Litoral y los puertos marítimos en el Pacífico.

PLANA MAYOR: Cnl. 1ro. Jefe Rufino Carrasco (de Talina); Cnl. 2do. Mariano Colodro (Tarija); Cnl. 2do. Aydte. My. Julio Aramayo (Mojo); Tte. Graduado, Máximo Morales (Estarca); Tcnl. Cesar Moscoso (Sucre); Tte. Graduado Portaestandarte, Rosendo Aramayo (Estarca); Cmdte, Eugenio Patiño (Cochabamba) y My. Graduado, Eloy Delgadillo (Potosí).

Comisario de Guerra: Manuel Alba, además de los capitanes: Enrique Mendivil (de Estarca) y Manuel Aramayo (de Suipacha).

PRIMERA COMPANÍA: Cmdte. Tte. 1ro. Mariano Resina (Sucre); Antonio Pareja (La Paz); Agustin Aramayo (Talina); Tte. 2do. Torcuato Alfaro (Suipacha); Rodolfo Avaroa (Atacama); Mariano Calancha (Sucre); Tte. Desario Alfaro (Suipacha); Tte. Graduado, Juan B. Aramayo (Talina); Sbtte. Aristipo Arraya (Tupiza); Venancio Toro (Sucre); Rosendo Justiniano (Tupiza); Nicolás Carrazana (Chiu Chiu); José Nuñez (Sucre); Félix Wayar (Santa Catalina); Lorenzo Perez (Portugalete) y Liborio Aramayo (de Talina).

SEGUNDA COMPANÍA: Cmdte. Evaristo Cazasola (de Tarija); Sgto. My. Juan Carretero (Tupiza); Cap. Manuel Maria Oliden (Potosí); Segundo Altamirano (Cinti); Tte. 2do. Juan Cortez (Tarija); Severo Aparicio (Tupiza); Simón Colodro (Tarija); Amadeo Martinez (Tarija); Toribio Montellanos (Tarija); Gualberto Ruiz (Buenos Aires); Mariano Millares (Tarija); Daniel Ríos (Tarija); Máximo Irahola (Potosí); Simón Mariscal (Potosí); Baldomero Bracamonte (Catamarca); Manuel Aparicio (Tarija); Antonio Gorena (Tupiza); Antonio Ojalbo (Portugalete); Hipólito Zamora (Nazareno); Issac Ustarez (Nazareno); Froilán Infante (Potosí); Sgto. 1ro. Justo Quinteros (Chiu Chiu); Pascual Cortéz (Tarija) y Asencio Ríos (Chiu Chiu).

Cabo 1ro. Andrés Lazo (Lipez); Cabo 2do. Diego Mercado (Cochabamba); Cadetes: Agustin Avaroa (Santa Marta); Alberto Gómez (Talina); Federico Alfaro (Suipacha); Sgto. 1ro. Manuel Barroso (Lipez); Sgto. 2do.Felipe Aramayo (Moraya); Gabino Torrez (Cotagaita); Federico Baldiviezo (Tarija); Juan de La Cruz Calera (Estarca); Rufino Rivera (Mojo) y Manuel Lens (Tarija)

Este heroico Escuadrón de Francotiradores, fue la vanguardia de la Quinta División del Ejercito de Bolivia, al mando del Cnl. Narciso Campero, compuesta por militares del sur y se concentró en Cotagaita (Nor Chichas) desde junio de 1879, cumpliendo órdenes del Presidente Daza, tuvo la misión de avanzar hacia Atacama para recuperar el Litoral boliviano que fue tomado por asalto por tropas chilenas el 14 de febrero de 1879.

Luego, desde San Cristóbal, (Sud Lipez), el Puesto Comando, el Escuadrón de Francotiradores al mando del Cnl. Rufino Carrasco, emprendió la agotadora travesía de 100 leguas hacia el desierto de Atacama.

El 30 de noviembre, treparon la cordillera de los Andes, cruzaron el cordón de volcanes, tras una fatigosa marcha, el 2 de diciembre avistaron el poblado de Colana, que días antes estaba ocupado por los “Cazadores del Desierto” grupo de elite del ejercito chileno conducido por un mercenario francés.

Tras pasar por Chiu Chiu, la columna boliviana en su avance a Calama, se enfrentó con una fracción del ejercito chileno, al que derrotó en la memorable Batalla de Tambillo el 6 de diciembre de l879.

La reducida, pero gloriosa Caballería Chicheña, ingresó victoriosa a San Pedro de Atacama, la población recibió con alborozo a este contingente al mando del Cnl. Carrasco, quién arrió la bandera chilena y en solemne ceremonia, izó en el mástil de la plaza, la bandera boliviana.

El grupo boliviano, permaneció un día en San Pedro, se reaprovisionaron de víveres, agua, forraje para los caballos y se replegaron hacia el sur, al oásis de Toconao, desde donde Carrasco, pidió refuerzos al mando superior de Potosí.

Después de paciente espera, envió un reclamo a la Jefatura del Estado Mayor en el que sostenía: “No he recibido, ni herraduras para mis caballos, me asignaron una misión por demás arriesgada, pese a las limitaciones de todo órden cumplimos nuestro deber, pero, en caso de desencadenarse un descenlace fatal, la responsabilidad será únicamente de ustedes”. Advirtió Carrasco.

En otra carta afirmó: “Sería muy doloroso, hacer una retirada, para que volvieran a ocupar nuestros enemigos (los chilenos) y ejercer venganza en estos pueblos indefensos”.

PERDIERON CABALLOS POR FALTA DE FORRAJE

“Salí de Toconao, como lo había dicho el 14 a la una p.m. informó Carrasco por caminos extraviados, sin recursos suficientes, en una marcha penosísima de diez días, tuve el sentimiento de dejar 26 caballos en el trayecto, pasamos cuatro días sin tomar una cucharada de caldo, pero siempre resignados y perseverantes, sobreponiéndonos a todas las penalidades y privaciones consiguientes en la campaña”.

Luego, desde Tupiza, Carrasco se trasladó a Potosí, donde sufrió humillaciones e insultos del Cnl.Nicanor Flores, conducido preso al Batallón “Calama”, fue incomunicado y procesado, no pudieron comprobar nada en su contra, dispusieron su libertad, presentó sus cuentas con saldo favorable de 400 bolivianos, que no se le canceló por órden de Flores.

Nicanor Flores, en la cobarde dispersión de San Francisco, fue el primero en huir, ante la arremetida de los chilenos, destinado a otros cargos, se dedicó a humillar y menospreciar a los dignos combatientes que participaron en primera línea en la Guerra del Pacífico.

Después de nueve años, de la heróica acción de Tambillo, recién se le reconoció los méritos al Cnl.Rufino Carrasco, Héroe Nacional, ascendió al grado de Gral. de Brigada por Orden Superior emitida el 1ro. de noviembre de 1888.