Batalla del Segundo Crucero

El coronel Ismael Montes, Jefe del Estado Mayor General del Ejército del norte, dice también:

“Siendo nuestra derecha el núcleo de la resistencia enemiga, a la vez que los puntos en que se libraba la batalla con más vigor y encarnizamiento, el coronel Pando mandó ejecutar un movimiento envolvente con el batallón Loa, llamando para el mismo objeto al piquete Murillo, pues el Loa envistió con tal ardimiento que en pocos momentos se hallaba dominado el flanco de la zanja que, en esa parte, servía de trinchera al batallón Alonso. Dominada la zanja, se pronunció la derrota del enemigo que en grandes grupos empezó a huir, o más bien precipitó su fuga, porque ya antes se observaba, a retaguardia de la línea, que muchos individuos se retiraban al lado de Paria.

Mientras tanto, nuestra ala derecha arrolló por su parte al enemigo, avanzando el batallón 1ro. y una fracción del escuadrón Abaroa, con el coronel Clodomiro Montes, por el lado de Challapampa, a interceptar el camino de Paria a Oruro, donde tomó algunos prisioneros y siete furgones cargados de abundantes pertrechos de guerra y de boca. Habían transcurrido cinco cuartos de hora desde que nuestra línea rompió los fuegos hasta el momento en que se declaró la derrota del enemigo, en cuya persecución avanzaron todavía gran distancia nuestras tropas. A las ocho de la noche el coronel C. Montes entraba a Paria, por el lado de Oruro, con el batallón 1º. Y parte del escuadrón Abaroa, llevando consigo los furgones y cañones tomados al enemigo sobre el camino de aquella ciudad”.

LOS MUERTOS Y HERIDOS

El ejército constitucionalista tuvo entre muertos y heridos 352. De éstos sólo dos muertos eran jefes de graduación: el coronel Martínez Campos, argentino, que con una ametralladora hizo un fuego mortífero sobre el campo federal, diezmando a los soldados del batallón Independencia y el teniente coronel Prudencio Valverde, tercer Jefe del 25 de Mayo.

Losa federales tuvieron 241 muertos y heridos. Entre los primeros se hallaban el teniente coronel José D. Zevallos y los oficiales de distintas graduaciones César Zuazo, Casimiro Tejeda, Torcuato Jiménez, Adolfo Ascarrunz, Miguel A. Flores, Alfredo Nava y Néstor Alarcón.

LOS COMUNARIOS

El coronel Pando había llevado unos diez mil comunarios para el caso de sitiar Oruro, debiendo ellos facilitar la vigilancia, cortar la línea férrea y conducir los pertrechos de guerra; pero no para la batalla, puesto que, faltos de armas, no podían servir para el combate.

Prestó, pues, la indiada importantes servicios en la campaña, pero en el combate del Crucero permaneció a distancia del campo de acción y concluida la lucha ayudó a enterrar los muertos, transportar a los heridos y conducir los furgones y la artillería a Oruro.

ALONSO SE DIRIGE A ANTOFAGASTA Y PANDO ENTRA EN ORURO

Producida la derrota en el campo constitucionalista, el capitán general Alonso, acompañado de muchos jefes y oficiales se dirigió a Oruro con la intención de organizar la resistencia; pero viéndose muy luego abandonado por todos y habiendo ya algunos jefes tomado el tren para Antofagasta, optó por seguir el mismo camino y en la misma noche.

En la tarde del 11, el coronel Pando, acompañado de 50 hombres, entró triunfante en Oruro.

La Guerra Civil estaba terminada.

EL DIARIO, 10 de abril de 1926.

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