Alto índice de violaciones preocupa a los legalistas

El índice alarmante de 5.311 violaciones en tres años, ha generado preocupación en la población y en los abogados del país, porque esta cifra no corresponde con la cantidad de detenidos o procesados, demostrando que los delitos quedan impunes en la mayoría de los casos.

De acuerdo a la jurista Paola Barriga, que en el momento atiende el caso de la niña Patricia Flores, hace más de diez años fue asesinada y violada en el interior del centro educativo en el que estudiaba, hasta el momento no se tiene a un culpable, siendo que solamente se encuentran en la cárcel dos personas sospechosas detenidas con medidas preventivas.

Según la abogada, la pregunta es, dónde está la misma cantidad de violadores, los mismos que también deberían estar purgando su delito en las diferentes cárceles del país.

Los últimos casos delincuenciales de asesinato y violación que se han suscitado en la país, especialmente en las ciudades troncales como es La Paz, Cochabamba, Santa Cruz y la ciudad de El Alto, han hecho que la preocupación trascienda hacía los abogados, por lo que se ratifica el pedido de endurecer las penas y un cambio total del Código de Procedimiento Penal.

Barriga señaló que las penas en estos dos casos, como la violación y el asesinato, son todavía muy débiles. “Debemos ver y analizar un poco más, las penas deberían ser muchísimas más altas, estamos cerca de esclarecer algunos casos de violación, para el cual una pena de 30 años para un violador o un asesino no es nada, se debería endurecer muchísimo más o sumar las condenas y de esta manera tendríamos un mayor castigo”, aseguró.

Producto del hacinamiento y la mala atención en los centro penitenciarios, los mismos se han convertido en ciudadelas donde, por la necesidad de sobrevivir, ya se tiene toda una estructura en el interior de estos centros. “El hecho de que entren a la cárcel ya no es un castigo, si bien es una condena para el que está privado de libertad, pero ahí adentro los reos viven junto a su familia, espacios de diversión, hasta droga y alcohol se vende y no es ningún secreto menos una novedad, entonces de qué castigo se está hablando”, señaló.