Conflicto de límites territoriales pasan por intereses económicos

Los conflictos por límites que surgieron en diferentes regiones del país, obligan a que el Gobierno y la Asamblea Legislativa vean con responsabilidad las tensiones, disputas y aprestos hostiles que pueden derivar en desenlaces imprevisibles, de ahí que surge la necesidad de definir la Ley de Límites.

El espectro nacional se ha teñido con enfrentamientos internos porque la falta de delimitación geográfica afecta la economía de los bolivianos, citar la quinua, el gas, la asignación fiscal por territorio, la caña, impuestos departamentales por hidrocarburos, entre algunos ejemplos más latentes.

Mientras las disputas de límites entre departamentos y provincias es cada vez más tensa y al borde de nuevos enfrentamientos, la lerda Ley de Unidades Territoriales se hace cada vez más urgente.

La radicalización de posiciones de los sectores enfrentados obliga a que el Gobierno y la Asamblea Legislativa tomen con responsabilidad estos temas y encuentren soluciones antes que las tensiones, disputas y aprestos hostiles generen desenlaces imprevisibles.

La Ley se encuentra, supuestamente, en proceso de socialización desde el año pasado, y recibió observaciones y sugerencias que deben ser evaluadas y atendidas en la medida de que se ajusten al ordenamiento legal y a la necesidad de conciliar los puntos de vista opuestos.

CONFLICTO POR LÍMITES

Son varios los departamentos que tienen problemas limítrofes, los más conflictivos son los que mantienen Oruro y Potosí, por una parte, y Tarija y Chuquisaca por otra. También existen otras disputas entre Tarija y Santa Cruz.

En el caso de La Paz el conflicto por los límites derivó en una pugna interna con municipios vecinos como Palca, Mecapaca y Achocalla. Entre los principales conflictos de límites en el municipio de La Paz, está Achocalla con la comunidad Alpacoma, zona Vertedero. El municipio de Mecapaca: Zona Zoológico, Parque Mallasa. Con el municipio de Palca: Pongo, Hampaturi, Chuquiaguillo, Villa Copacabana, Pampahasi, Ciudad del Niño, Kupini, Irpavi, Ovejuyo y aledaños. Con el municipio de El Alto: Zona Faro Murillo, Urbanización Alto Villa Victoria y comunidades aledañas al Nevado Huayna Potosí (zona minera).

En el departamento de Cochabamba existen al menos 25 conflictos de límites internos, además de una conflicto con Beni que se disputan el parque Isiboro Sécure. Cochabamba argumenta tener bases técnicas e históricas para reclamar que su territorio comienza desde las nacientes del río Sécure, en el oeste. Esta visión aspira a que el Parque Nacional Isiboro Sécure sea considerado reserva compartida y no exclusivamente de Beni, como sostenían las anteriores autoridades benianas.

El problema más agudo de límites tiene como epicentro las provincias Salinas de Garci Mendoza (Oruro) y Coroma (Potosí), que involucra, además a Pampa Aullagas y Quillacas.

Estos departamentos se disputan este territorio por la existencia de yacimientos de piedra caliza para la fabricación de cemento, producción de quinua y yacimientos de uranio.

Otro problema álgido, es el que enfrentan Tarija y Chuquisaca, con la delimitación de geográfica sobre la ubicación del megacampo Margarita.

Según la agencia de noticias ANF, el anticipo del estudio técnico de Gaffney Cline & Associates establece como primeros parámetros que los reservorios H1a y H2 pertenecen íntegramente al departamento de Tarija y sólo el H1b está compartido con Chuquisaca. El próximo 19 de abril se conocerá el informe final junto con el mapa georreferenciado y el cálculo de los factores de distribución para cada departamento productor. Aún no existen respuestas, cuando este es un tema nacional, que debe ser resuelto a la brevedad posible.