El enviar una nota de felicitación es sólo un formalismo, porque me considero un amigo de El Diario desde cuando estuve en la Paz como deportista y ahora como Presidente del Comité Olímpico Boliviano.
Naturalmente que mi primera lectura se orienta a la sección deportiva, pero el análisis que hago del contenido diario me permite decir que goza de esa línea independiente y formadora que uno busca en cada medio de comunicación social.
Los 108 años son una muestra de vigencia permanente y de constancia en medio de tantos problemas que surgen dentro de una empresa y el entorno nacional.