Gobierno anuncia anulación de contrato con OAS y abre nuevas interrogantes

El presidente del Estado, Evo Morales, ayer determinó iniciar la anulación del contrato con la empresa brasilera OAS en los tramos I y III del proyecto carretero Villa Tunari – San Ignacio de Moxos. Para expertos consultados por EL DIARIO, las palabras del Mandatario abren una serie de interrogantes y modifican la relación entre Bolivia y Brasil.

El Presidente, dijo ayer en conferencia de prensa que “hay incumplimiento de parte de OAS y por eso hemos decidido, hemos iniciado un proceso de anulación del contrato de la construcción en el camino Villa Tunari - San Ignacio de Moxos, especialmente en el tramo I y III que estaba a cargo de OAS, por incumplimiento de parte de la empresa”.

El abogado Edwin Rojas, señaló que en base a las cláusulas establecidas en el contrato realizado entre la OAS y la ABC, se debe determinar si se trata de la recisión del contrato por incumplimiento del acuerdo para actuar por la vía del arbitraje o la justicia ordinaría. Por su parte, el analista económico, Julio Alvarado, expresó que otro de los temas que queda en el aire es la continuidad del préstamo efectuado por la banca brasileña al Estado Boliviano.

El jurista señaló que al momento de establecer un contrato entre una “X” empresa y el Estado se suscribe en el mismo dos boletas de pago. Una relacionada con un seguro bancario y la segunda en base a la protección de los adelantos que se realiza por el contratante.

“Los contratos hablan de una boleta que puede ser una póliza de seguros bancaria y una de cumplimiento de contrato, y otra con relación al anticipo. Las boletas tienen que respetarse para que el Estado resarza los daños y normalmente esto termina en un juicio”, dijo.

Rojas expresó que de llegar a determinarse ir a un juicio, este se realizará en base a lo que establezca el contrato, considerando cuál sea la cláusula establecida. Explicó que si el contrato establece que el juicio a realizarse es vía arbitraje, será esta instancia la que determine cuál de las dos partes tiene la razón, pero de realizarse un juicio por la vía ordinaría será el encargado legal del caso quien definirá el mismo; sin embargo, en este tema existe la posibilidad de acudir a la apelación.

“Se tiene que ver si tienen una cláusula arbitral o si han pactado definir las cosas por la vía ordinaria. Si el contrato dice que irán por la vía arbitral, obviamente que no podrán ir a la justicia ordinaria y ese tribunal es el que analiza el argumento de las partes, sobre quién ha incumplido de las dos partes”, mencionó.

El economista Julio Alvarado se refirió al crédito del Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social de Brasil (BNDES) que asciende a 332 millones de dólares, del monto total de 413 millones de dólares que cuesta la obra Beni – Cochabamba.

Para el entrevistado, se debe analizar si se mantiene o no dicho préstamo después del anuncio del presidente Evo Morales de la anulación del contrato con la OAS, debido a que la entidad financiera se encuentra bajo la legislación brasilera.

“Los prestamos del BNDES van con la cláusula que establece que el crédito se debe utilizar para que una empresa brasilera sea la que ejecute la obra; ahora hay que ver si el Gobierno tiene la capacidad de renegociar con el BNDES, para que ese crédito pueda ser utilizado por otra empresa”, argumentó.

De no poder concretar acuerdos con la banca brasilera para el uso del crédito por otra empresa de otra nacionalidad, Alvarado señaló que el Ejecutivo tendría que devolver el préstamo realizado, incluido el monto ya invertido.

Asimismo, señaló que una vez que se determine, a través de un juicio, cuál de las dos partes ha incumplido con el contrato, el infractor deberá resarcir los daños a la otra parte, con el monto que se determine de mutuo acuerdo como establecen las normas legales internacionales. En ambos casos, las relaciones entre Bolivia y Brasil podrían verse afectadas.