Los docentes se tapian en cinco ciudades y el Gobierno desahucia una nivelación salarial entre urbanos y rurales. Las mesas de trabajo no arrojan soluciones.
Un día más que pasa y el problema de los médicos no avanza, por el contrario, se multiplican los piquetes de huelga en el país exigiendo la abrogación del Decreto Supremo 1126 que amplía la jornada laboral de este sector a ocho horas.
El piquete de huelga del Colegio Médico de Bolivia encabezado por Alfonso Barrios, titular de esta entidad se reforzó ayer con la incorporación de otros seis profesionales. El dirigente dijo que la medida se acrecienta en todo el país y pidió al Gobierno la construcción de más hospitales para atender mejor a la población y en proporción a las necesidades.
En tanto, quienes representan a los médicos en la mesa de diálogo con el Gobierno abandonaron la reunión porque no encuentran un interlocutor flexible y tampoco respuesta a sus peticiones.
Por su parte, los maestros urbanos radicalizaron sus medidas de presión en cinco ciudades del país demandando nivelación salarial. En La Paz, se sumaron al grupo de tapiados los dirigentes Wilma Plata, Luis Copeticona y Nilton Pérez.
La profesora Plata pidió a otros sectores sociales del país sumarse a las medidas de presión para hacer fuerza conjunta por las reivindicaciones salariales.
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