El encuentro tripartito entre Gobierno, confederación de maestros rurales y urbanos de Bolivia para analizar la nivelación de salarios, no alcanzó resultados positivos debido a la imposición de maestros rurales, lo que obligó a los docentes urbanos a romper el diálogo y radicalizar sus medidas con la instalación de más piquetes huelgas de hambre en todo el país.
El debate fue intenso entre el ministro de Educación, Roberto Aguilar, acompañado de sus viceministros, con la dirigencia de la Confederación de Trabajadores de Educación Urbana de Bolivia, encabezado por el secretario ejecutivo, Jorge Baldivieso, y representantes de la Confederación Nacional de Maestros de Educación Rural de Bolivia, comandado por el secretario ejecutivo, Pedro Tanaka.
Tras el diálogo prolongado en instalaciones del Ministerio de Educación, el dirigente de los maestros urbanos, Jorge Valdivieso, mencionó que el encuentro convocado por el Gobierno no tuvo sentido debido a la presencia de sus colegas rurales. Aclaró que la demanda de nivelación salarial sólo debe ser analizada con la autoridad del área.
“Se ha roto el diálogo, no hay ningún cuarto intermedio; lamentablemente las negociaciones con el Gobierno han fracasado, sin embargo, nosotros sí teníamos el compromiso firme de llegar hasta el final a través del diálogo desde el momento en que iniciamos las medidas drásticas del tapiado, sin embargo, no fuimos entendidos, pues tuvimos una respuesta inmadura de parte del Gobierno”, afirmó el dirigente.
Baldivieso denunció que la intención del Gobierno en las últimas reuniones fue de enfrentar a ambos sectores.
A juicio del Ministro de Educación, la reunión tripartita fue para consensuar de manera conjunta las demandas con la finalidad de que no surjan conflictos debido a los desacuerdos. “El punto que nos impide firmar estas dos actas de acuerdo, se halla en el hecho de que los maestros rurales consideran que la situación se distorsionaría si se responde favorablemente a los urbanos, mientras que este sector considera una injusticia que los rurales estén condicionando la solución a sus demandas”, enfatizó.
A su turno, el representante de los maestros rurales, Pedro Tanaka, señaló que su sector está dispuesto a continuar con el diálogo, sin distorsionar sus derechos adquiridos.
“No pueden darle una solución al magisterio urbano atropellando los derechos del magisterio rural, de haber conseguido un salario diferenciado por las condiciones de trabajo del campo”, mencionó.
Luego de abandonar el diálogo, la dirigencia del magisterio urbano se trasladó inmediatamente a sus predios para destapiar a sus colegas; Federico Pinaya y Adrián Quelca, quienes mantuvieron la medida durante seis días consecutivos.
“Pese a la falta de solución del Gobierno nosotros destapiamos a nuestros compañeros por que la salud de ellos se ponía riesgosa cada vez más. Sin embargo, desde este miércoles, el número de tapiados se intensificará en todo el país hasta conseguir nuestra nivelación salarial con los rurales”, acotó el dirigente de los maestros urbanos..
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