Dirigentes del sector del transporte público manifestaron ayer que a partir de este lunes iniciarán una medida de protesta de desobediencia civil a la norma promulgada por el Gobierno Municipal de La Paz.
Los transportistas no acatarán la restricción vehicular, no aceptarán sanciones y que el paro indefinido es inminente. “Estamos pidiendo al Congreso Nacional nos apoyen para un paro de 48 horas”, dijo el secretario general de la Federación de Transportistas de La Paz, René Vargas.
Por otro lado, la alcaldesa interina, Dennis Osterman, puntualizó que el control de restricción vehicular es competencia exclusiva de Tránsito y esta instancia es la deberá hacer cumplir las normas. Por tanto, “la reacción de los trasportistas no corresponde de ninguna manera, en caso de que esto no se cumpla continúan los procesos legales”, advirtió.