El medio ambiente está ante el reto de una economía sostenible

Pese a lo que pueda creerse, la economía verde no hace referencia al color de los billetes, sino a un nuevo paradigma de crecimiento económico con perspectivas ecológicas. El concepto no es nuevo, ya desde 1987 se hablaba de un desarrollo sostenible, sin embargo el encuentro internacional Río +20, organizado por las Naciones Unidas (ONU) coloca nuevamente en agenda el tema para definir una economía mundial que respete al medio ambiente.

Al respecto, el ministro de Medio Ambiente y Agua, Felipe Quispe Quenta, en entrevista con radio Panamericana, se refirió a la participación de Bolivia en el encuentro Río+20. La autoridad afirmó que su ministerio está trabajando para plantear una “economía con desarrollo sostenible que tenga equilibrio entre las necesidades que existen y también mirando cómo queda la naturaleza”.

El Gobierno trabaja en una nueva normativa en materia ambiental. En entrevista con El Diario el Coordinador Departamental de la Liga de Defensa del Medio Ambiente (Lidema), Elvis Andrés Veliz, calificó como una decisión positiva que, mediante una norma, se busque proteger a la Madre Tierra. “Imaginamos que a partir de esa ley, el Gobierno va a empezar a hacer las gestiones en el tema ambiental y eso es un buen indicador”, señaló.

Actualmente el tema de prioridad para el ministerio de medio ambiente y agua es la implementación de proyectos de agua potable, saneamiento básico, riego y manejo integral de cuencas. De acuerdo con el ministro Quispe, se está destinando más de 200 millones de dólares a este tipo de proyectos, porque el acceso al líquido elemento es un derecho fundamental.

Según la autoridad gubernamental, la coordinación con los municipios a través del programa “Mi Agua”, permite un saneamiento de riego que también será sostenible. Por otra parte, se está cumpliendo con la elaboración de la Ley de aguas, en la que se define cómo se planificará el tema a nivel nacional, departamental y municipal.

Pese a estos adelantos, aún resta un largo camino por recorrer. Veliz, explica que “el tema de desarrollo sostenible está muy ligado al tema de tecnologías aplicadas al tema de cambio climático”. “Es importante encontrar mecanismos, políticas que incentiven el uso de energías limpias, por ejemplo la industrialización del gas, que sería un tema interesante para disminuir la contaminación”, dijo el ambientalista.

Según el coordinador de Lidema, “también debe tenerse en cuenta la generación de sistemas productivos amigables con el planeta o el simple hecho de elevar los rendimientos de producción, lo que haría que la presión sobre la tierra en áreas vírgenes disminuya y habría menor deforestación”.

El encuentro de Brasil +20 es un buen inicio para plantear una economía que no comprometa el futuro de las siguientes generaciones. Sin embargo estas propuestas deberán ser articuladas en políticas concretas de cada región. Según Veliz “hay que plantear cosas que se puedan llevar a cabo, por ejemplo en el tema de la minería”. En este caso, la economía verde no sólo tendrá que ser la meta, sino también el camino.