Huelga de hambre reclama permanencia de sacerdote

Oruro, 3 (EL DIARIO).- Cinco personas mantienen huelga de hambre en la sede del Comité Cívico de Oruro reclamando la permanencia de un sacerdote en el santuario de la Virgen del Socavón, quien durante veinte años hizo varios proyectos y profundizó el respeto hacia el Carnaval de Oruro, obra maestra del Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad.

El obispo de la Diócesis de Oruro, monseñor Cristóbal Bialasik, no quiso emitir criterio alguno.

Sin embargo, a través de un comunicado, pidió a las personas en ayuno, “unirse a nuestra gratitud y respeto por el padre Bernardino (Zanella), implorándoles que dejen de lado todas las manifestaciones públicas que dañan a la comunión de la iglesia local”.

El padre Zanella, que se encontraba como rector del Santuario de la Virgen del Socavón, fue cambiado de destino y, según la instrucción del Obispo, continuará sus funciones en Santiago de Chile. Ese hecho –según los feligreses movilizados-, es un castigo para un sacerdote que estaba realizando varias obras de bienestar social en Oruro.

Juana Antequera, que se encuentra en huelga de hambre desde el pasado domingo 29 de abril en la oficina del Comité Cívico, dijo que se está reclamando “respeto a la voluntad del pueblo de Oruro, que está apoyando al padre Zanella, para que se quede en esta ciudad, no como rector del Santuario del Socavón, sino como miembro de los Siervos de María”.

Explicó que el Obispo “no ha querido recibirnos y tampoco quiere hablar sobre este tema que es tan sensible para la ciudadanía, motivo por el cual estamos en ayuno, junto con otras cuatro personas que también están en la misma medida”.

El ayuno se cumple con la participación de Susana Alcalá, Maribel Zuleta (que ayer ha sido dada de baja), Juana Antequera, Urbelinda Lizarazu, Florencio N. y Anibal N. Los dos últimos han preferido mantenerse en la incógnita, pero respaldan la huelga. De la misma forma, otros comunarios de Soracachi y de otras parroquias llegaron ayer hasta las puertas de la parroquia de las Hermanas Cruzadas, donde el obispo y otros sacerdotes emitieron un comunicado.

“Nos hemos reunido en el Obispado, este día 1 de mayo, la Comunidad de los Siervos de María, el Obispo, el Consejo Consultivo y algunos sacerdotes de la Diócesis, en un clima de honda fraternidad, para conversar sobre lo que en este último tiempo ha estado sucediendo en nuestra iglesia orureña”, señala el comunicado.

“Pedimos perdón a Dios y a nuestro pueblo, por el daño y el dolor que se ha producido en muchos de nuestros hermanos y hermanas, a causa de malos entendidos en lo que se refiere a las normas y procedimientos de la Iglesia. Nos anima el deseo de la comunión al interior de nuestra Iglesia”, reflexionó.

“Los cambios o traslados de los religiosos y sacerdotes son una práctica habitual en la Iglesia Universal, a fin de que la centralidad del mensaje del Evangelio esté en Jesucristo, el único Buen Pastor que nos da vida plena” y “lamentamos que algunas personas, creyendo hacer el bien, actúen en formas que no corresponden a la práctica de la Iglesia Católica”, explicó.

OPINIÓN

A través de un comunicado, el obispo de la Diócesis de Oruro, monseñor Cristóbal Bialasik pidió a las personas en ayuno, “unirse a nuestra gratitud y respeto por el padre Bernardino (Zanella), implorándoles que dejen de lado todas las manifestaciones públicas que dañan la comunión de la iglesia local”.