Aún no se presentaron pruebas del hecho

Los 52 documentos gráficos, entre fotos y vídeos, del cadáver de Osama Bin Laden en poder de la CIA seguirán siendo un secreto de Estado al que sólo han tenido acceso unos pocos altos cargos y congresistas.

Un juez denegó recientemente el permiso para publicar las imágenes que pedía Judicial Watch, un grupo conservador dedicado a querellarse para conseguir información clasificada de la Administración Obama. “Una imagen puede que valga más que mil palabras... Pero en este caso las descripciones verbales de la muerte y el entierro de Osama Bin Laden tendrán que bastar”, dijo el juez del distrito de Washington DC, James Boasberg.

El director del servicio secreto de la CIA, John Bennett, declaró que las fotos y las imágenes de vídeo de Bin Laden son “muy gráficas, porque muestran la herida moral de la bala y otras imágenes igualmente desagradables de su cuerpo”. (Publicó El Mundo.es)

La Administración explicó que tiró el cadáver al mar para resolver rápido el problema de dónde enterrar al prófugo saudí, respetar el límite islámico de un entierro en las siguientes 24 horas del fallecimiento y evitar que la tumba del terrorista se convirtiera en lugar de peregrinaje de extremistas. Obama dijo de inmediato que no sacaría las imágenes. “No es lo que somos. No paseamos nuestros trofeos”, aseguró en una entrevista horas después del anuncio de que Osama había muerto.