Ante amenazas de comunarios
La novena marcha indígena aún se encuentra en Bermeo y no ha iniciado su paso a San Ignacio de Moxos, lugar en que los habitantes del lugar rechazan la movilización y sus argumentos en contra de la construcción de la carretera por el medio del Tipnis. Sin embargo, el dirigente técnico de la Cidob, Lázaro Tacoó afirmó que en lugar de buscar controversia y un posible enfrentamiento, la marcha llegará con el objetivo de concertar el diálogo con los comunarios de la región, pero sobre todo solicitan que sea el Gobierno nacional que se haga presente en el lugar.
“Somos una marcha pacífica y lo que buscamos es el diálogo pero sería mejor hablar con el Gobierno nacional, tiene que entender que nosotros no buscamos confrontación. Hemos pedido dos veces el dialogo al Gobierno nacional en Trinidad, en Gundonivia y nunca nos quiso hacer caso. Queremos el diálogo pero también queremos que el Gobierno se haga presente”, aseveró.
Tacoó explicó que la situación violenta que se genera en San Ignacio de Moxos, fue provocada por el Ejecutivo con el objetivo de lograr consenso para la consolidación del proyecto caminero.
“Hay mucha gente que nos apoya, no son todos los comunarios los que están en contra de nosotros, son los militantes del MAS y gente que apoya al Gobierno”, sostuvo.
El representante indígena señaló que los pueblos indígenas de Tierras Bajas, nunca estuvieron en contra de la carretera y que sólo piden que el proyecto sea desarrollado a partir de otro trazo.
“El Gobierno quiere la carretera para sembrar la coca, en beneficio de los cocaleros, la carretera pasa cerca de donde viven los colonizadores cuando las comunidades se encuentran al otro lado”, afirmó.
Por lo tanto, según el dirigente, cualquier situación que pueda generarse, en caso de que sea violenta, será responsabilidad del aparato estatal.
“La marcha pide la presencia de la Iglesia Católica y Derechos Humanos para que en el momento de entrar a San Ignacio de Moxos, ellos estén presentes y sean testigos”, dijo.
Por otro lado, informó que los marchistas aun continúan en Bermeo y esperan reiniciar el recorrido a San Ignacio de Moxos, hoy por la mañana y esperan el arribo de indígenas de otras regiones.
De acuerdo con la Fundación Tierra, la ciudadanía de San Ignacio parece dividida en relación a la marcha indígena, algunos se manifiestan contra los dirigentes de la movilización y otros a favor de la columna.
MEDICINAS
La representación de la Defensoría del Pueblo beniana gestiona la donación de medicamentos para la columna indígena. El representante, Luis Revollo, informó que hizo una solicitud de solidaridad al Colegio Médico departamental y a personas solidarias para contar con productos que combatan las afecciones respiratorias, las diarreas y deshidrataciones que se presentan como efecto de la caminata indígena.
Por otro lado, ante el planteamiento de los indígenas, el párroco de San Ignacio de Moxos, Franza Bejarano, explica que la Iglesia Católica no discrimina a sus feligreses: “todos somos hijos de Dios, al margen de las diferencias que tengan unas personas con otras”.
El religioso afirma que la Iglesia hará todo lo necesario para que pueda darse un proceso de diálogo y resolución pacífica de las controversias en torno a la problemática de la construcción de la carretera Villa Tunari - San Ignacio.
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