Opinión de analistas

Declaración de suspensión del decreto sólo dilata el conflicto

Dudan que la realización de la Cumbre de la Salud sea la solución final a los conflictos.


El sector salubrista está decidido a radicalizar aún mas sus medidas demandando la abrogación del decreto que incrementa a ocho el horario de trabajo para este sector.

Según los juristas, el término suspensión no existe en el ámbito legal, por lo que la determinación gubernamental, traería algunas consecuencias al país. En tanto, los analistas aseguran que la medida dilatará la controversia y dudan que la realización de la Cumbre Revolucionaria de la Salud dé una solución definitiva al problema.

Tras más de 70 días de conflicto y radicalización de medidas de presión del sector salud, el presidente Evo Morales, anunció el viernes pasado, la suspensión del polémico Decreto Supremo 1126.

Al respecto, el abogado Waldo Albarracín, explicó que en la nomenclatura jurídica, no existe el término “suspensión”, por lo que a su juicio, se debería aplicar la abrogación total de la norma pero, a través, de otra normativa de la misma jerarquía. “Es decir, otro decreto que deje sin efecto al anterior decreto”, citó.

Asimismo, explicó que la figura de la derogatoria, que consiste en la modificación parcial de la norma, también se realiza a partir de una disposición legal de la jerarquía.

“Lo que sí puede pasar, es que mañana el Gobierno dicte un Decreto Supremo y en el mismo se dicte un tiempo determinado a partir del que se vaya a aplicar la norma”, señaló.

Por otro lado, Albarracín, lamentó que el Ejecutivo genere incertidumbre en el país por establecer medidas poco claras y coherentes, lo que provoca que se agudicen los conflictos.

“Esta pasando lo mismo que con la marcha del Tipnis, que por una movilización, aplica una Ley y luego como no le conviene aplica otra norma, a partir de otra marcha provocada por ellos mismos (Gobierno)”, sostuvo.

A su turno el analista Franklin Pareja, coincide con Albarracín y calificó de “engañosa”, la postura del aparato gubernamental.

“Parece una trampa, porque pretenden trasladar la decisión a las organizaciones sociales de dudosa representatividad, porque generalmente las organizaciones sociales en las cumbres, están digitadas por el Gobierno”, indicó.

Al parecer, el slogan de la campaña gubernamental “Gobernar obedeciendo al pueblo”, se cumple a cabalidad sólo con las organizaciones sociales afines al oficialismo, es decir, que el Primer Mandatario gobierna obedeciendo a “su pueblo”, según afirmó el analista.

“Quieren construir leyes bajo un mandato ficticio más que bajo un mandato popular. Las cumbres sociales no son cumbres del pueblo son cumbres del MAS y en estos eventos el Gobierno elabora su agenda legislativa”, señaló.

Siguiendo este criterio, esta clase de encuentros quitan potestad al Órgano Legislativo y a la genuina representación democrática del país.

CUMBRE

Asimismo, Pareja afirmó que la Cumbre Revolucionaria de la Salud, a realizarse en los próximos días, será un evento más que apoyará un discurso demagógico y populista, que posiblemente desarrolle el presidente Morales, por lo que este encuentro no dará una solución definitiva al problema.

“El encuentro plurinacional que hubo el año pasado, demostró que no representaba a la población boliviana ni reflejaba sus necesidades, porque las organizaciones sociales no son el pueblo boliviano, son una parte del pueblo. Esta nueva cumbre, será similar y no dará una solución definitiva”, sostuvo.

De igual manera, Pareja lamentó que después de estos conflictos que duraron más de un mes, es el pueblo boliviano quien sufre las consecuencias y en esta controversia, los pacientes.

“Eso tiene que ver con la incapacidad de los gobernantes. El pueblo está como un espectador de una serie de medidas que son lamentables y el costo que estamos pagando los bolivianos es demasiado elevado”, citó.

MEDICOS

En tanto, el presidente del Colegio Médico de La Paz, Luis Larrea, ratificó que las medidas de presión continuarán y aseguró que el sector no confía en la postura gubernamental, debido a que el supuesto intento de diálogo del Ejecutivo y la suspensión del Decreto Supremo 1126, es sólo “una cortina de humo”, mientras prepara otra estrategia. “No olvidemos el proyecto presentado por el diputado Galo Bonifaz (MAS) que plantea elevar a rango de Ley, este decreto”, aseveró.

 
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