Novena marcha ingresará a San Ignacio con resguardo

La novena marcha indígena se apresta a ingresar a San Ignacio de Moxos en medio de hostilidad en la zona. Los dirigentes solicitaron resguardo policial y esperan la llegada de representantes de derechos humanos y la Defensoría del Pueblo para evitar cualquier posible enfrentamiento.

A ritmo de tambores, los marchistas llegaron a la localidad de San José del Algodonal a menos de dos kilómetros de San Ignacio de Moxos, donde también arribaron representantes del Defensor del Pueblo. Sin embargo, la movilización tuvo que parar ante el rechazo y bloqueo efectuado por la Federación de Juntas Vecinales (Fejuve) que insiste en impedir que los indígenas pasen por la plaza principal.

La novedad de ayer fue la incorporación del presidente de la subcentral Tipnis, Fernando Vargas, quien a pesar de padecer dengue, decidió acudir a la marcha aunque sólo por unas horas.

El dirigente del Consejo Nacional de Markas y Allyus del Qullasuyu (Conamaq), Rafael Quispe, confirmó a EL DIARIO que la marcha indígena reanudará su paso hacia San Ignacio de Moxos, entre hoy y mañana, dependiendo de las diligencias que puedan realizar los mediadores convocados por el sector, como Amparo Ballivián de la Asociación Permanente de Derechos Humanos de Bolivia (Apdhb) o el vocero de la Defensoría del Pueblo, Eugenio Muyucundo.

Por otro lado, el dirigente Lázaro Tacoó pidió nuevamente la presencia de representantes de la Iglesia Católica para que sean testigos del ingreso a San Ignacio. “Con la presencia de la Iglesia, habrá un clima de seguridad y confianza”, afirmó.

Inicialmente, quienes protagonizaban el conflicto, manifestaban estar dispuestos al diálogo con los marchistas, aunque se mantenían firmes en la postura de no permitir el paso de la columna indígena.

El paro cívico en San Ignacio de Moxos, se cumplió con bloqueos, barricadas con alambres de púas en San Ignacio de Moxos. Un grupo de pobladores a la cabeza de la Central Obrera Regional (COR) y las juntas vecinales promovieron la movilización que mantiene en vigilia a los pobladores que están a favor de la construcción de la carretera que uniría a los departamentos de Beni y Cochabamba.

Al menos un centenar de vecinos se encuentran apostados al ingreso de San Ignacio con carteles de rechazo a los marchistas y exigen que desvíen su paso por la circunvalación. La dirigente de la marcha, Bertha Bejarano, rechazó la prohibición de libre transitabilidad sumida por sectores cívicos del a ciudad intermedia. “Nadie puede prohibirnos pasar por nuestra casa grande. Si las bases quieren pasar por el centro, por allí pasaremos”, manifestó.

En tanto, el defensor del Pueblo, Rolando Villena, se manifestó sobre el escenario conflictivo que se vive en la zona, solicitando que los indígenas tengan acceso irrestricto a suministros y víveres de primera necesidad.

“No pueden impedir que ingresen a esta población ni a ningún otro lugar del país, no estamos en un país que está identificando lugares donde los que no piensen igual que ellos son sus enemigos; esto es un atentado a la democracia y el libre tránsito”, remarcó.