Las juntas de vecinos de San Ignacio de Moxos endurecieron su postura y aún no permiten el paso de la novena marcha indígena. En tanto, los dirigentes de Tierras Bajas han solicitado el resguardo de la Policía, Defensoría del Pueblo y Derechos Humanos a fin de evitar cualquier confrontación o violencia innecesaria.
Los pobladores de San Ignacio incluso hicieron retroceder al viceministro de Régimen Interior, Jorge Pérez Valenzuela, quien trató infructuosamente de disuadirlos. El bloqueo se mantiene y se observan carteles con alusiones contra los principales dirigentes de la marcha como Pedro Nuny o Berta Bejarano.