El Gobierno convocó ayer a los sectores sociales de la población a salir a las calles a marchar y bloquear arterias de la ciudad en contra del paro médico y de los trabajadores en salud que mantienen sus medidas de presión desde hace siete semanas, en busca de la derogación del Decreto Supremo 1126 y la demanda de ser incorporados en la Ley General del Trabajo.
En conferencia de prensa, el vicepresidente Álvaro García Linera dijo que en adelante cualquier muerte que se produzca de niños o personas por falta de atención médica será responsabilidad de los dirigentes del sector en conflicto, que mantienen a sus bases movilizadas en contra de la jornada laboral de ocho horas diarias, por lo que descartó la anulación del cuestionado decreto, cuya vigencia será evaluada el 27 y 28 de julio en el “cumbre nacional por la revolución de la salud pública”.
“Quiero convocar al pueblo de Bolivia, los trabajadores, los vecinos, comerciantes, defender la salud, que no siga esta prepotencia y este abuso, los convocamos a movilizarse para defender el sistema de salud público, a cada vecino, a cada gremial, fabril, comerciante, trabajador, obrero, oficinista a movilizarse, defendamos juntos el sistema de salud, el Gobierno ha hecho lo que ha podido con la suspensión del decreto, ha llegado hasta ahí, le toca al pueblo defender”, manifestó García Linera desde la Vicepresidencia.
De acuerdo con la versión de ANF, la autoridad de Estado explicó que el decreto 1126 suspendido, desde el viernes pasado por el presidente Evo Morales, no entrará en vigencia hasta que la cumbre de salud decida si se debe aplicar, o, no las ocho horas de trabajo, para ello se buscará convocar a todos los sectores sociales, incluidos los que representan al ciudadano de a pie, para obtener las mejores conclusiones.
“No existe motivo para que continúe el paro del sector de salud, no existe motivo, no está en vigencia el decreto se ha suspendido no se va aplicar el decreto (…) el gobierno ha cedido y suspendido el decreto”, reiteró García Linera, quien calificó el paro médico como caprichosa, abusiva, criminal y política.
Considera que detrás de estas protestas en el sector salud se encuentra el Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR) y otros partidos políticos de la oposición al proceso de cambio que se encuentran comprometidos con las movilizaciones de protesta y paros, por lo que se comprometió a buscar pruebas para demostrar la implicación de ex funcionarios allegados al Gobierno de Gonzalo Sánchez de Lozada.
Para el vicepresidente, trabajar las 8 horas es acabar con los privilegios de sectores beneficiados en gobiernos neoliberales, “porque se paga por ocho horas y no se trabaja por ocho horas”, según la autoridad de Estado, habría muchos trabajadores, enfermeros y médicos en el área rural y urbana que si trabajan ocho horas e incluso muchos horas más en beneficio de la población.
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