Analistas explican procesos estatales en inversión externa

El analista económico, Gonzalo Chávez, expresó que en la actualidad el uso de las terminologías como expropiación, venta y confiscación son englobadas muchas veces dentro del concepto de “nacionalización” por parte de representantes del Gobierno al ver el impacto que causa esa palabra en la población, además de sus beneficios políticos.

El uso de la nacionalización como forma de propaganda política ha sido emprendida por este gobierno, aunque no es el único caso en la historia nacional, puesto que durante la Revolución de 1952 se dio la misma figura. Empresas que fueron capitalizadas o privatizadas durante el primer gobierno de Gonzalo Sánchez de Lozada, poco a poco vuelven a administración estatal como sucedió el 1 de mayo con la Transportadora de Electricidad (TDE) cuyas acciones pasaron a control de la Empresa Nacional de Electricidad (ENDE).

Chávez señaló, que en los años 50, el hablar de nacionalización hacía referencia al acto de expropiación de los bienes de una determinada compañía, acción que implicaba la no cancelación de ningún monto que resarza algún daño causado a los accionistas, por concepto de embargo de los bienes.

Durante el gobierno de Evo Morales se dieron expropiaciones y compras de acciones que fueron consideradas por el Ejecutivo como “nacionalizaciones”. Un ejemplo de una compra de acciones, que luego fue considerada como una nacionalización, es el caso de la Empresa Nacional de Telecomunicaciones (Entel), que el 1 de mayo de 2008 retornó a administración boliviana tras el proceso de capitalización de la década de los años 1990.

“En el caso de la TDE se dio una reversión de acciones que viene acompañada de un pago, la cual hemos llamado también nacionalización”, dijo.

Añadió que muchas veces esta forma de proceder “es una construcción política muy ambigua que tiene sobre todo usos electorales que es muy común en América Latina y en Bolivia”.

En tanto, el analista económico y especialista en temas energéticos, José Luis Carvajal, señaló que la connotación que tiene otra de las terminologías como ser confiscación hace alusión a la retención de acciones que no implica la cancelación de una indemnización, acción que se efectúa cuando la empresa confiscada habría “violentado las normativas del país”.

Añadió que la confiscación, es una acción que durante años ha sido utilizada por diversos gobiernos, para efectuar la nacionalización de acciones.

Carvajal expresó que existen formas de proceder para hacer efectiva una nacionalización, entre estos mecanismos se encuentran la compra y expropiación de bienes.

La compra de acciones hace alusión a una negociación entre las dos partes, el empresario y los representantes del Estado para efectuar el traspaso de las acciones de manera “amigable” y con beneficio para ambas partes.

Sobre el proceso de expropiación el entrevistado explicó que esta figura se encuentra dentro de la Carta Magna en su artículo 57 e implica un procedimiento legal cuando se afecta al Estado.