El paro de la Central Obrera Boliviana (COB) que se iniciará hoy y se extenderá hasta el viernes, no provocará la suspensión de las labores escolares en el país porque la Confederación del Magisterio Urbano decidió sólo movilizarse en los turnos en que los docentes no trabajan.
Uno de los ejecutivos de la Confederación de Maestros, Jorge Baldivieso, afirmó que el último ampliado del sector, realizado la semana pasada, decidió no suspender las clases. El instructivo ya se emitió a las diferentes federaciones.
“Hemos instruido que se hagan movilizaciones por turnos y con la características que tiene cada región, se debe coordinar con las centrales obreras departamentales para apoyar con las movilizaciones, pero no hay suspensión de clases”, declaró el sindicalista.
Los docentes tienen sus condiciones para acatar el paro cobista, según el dirigente, quienes deben paralizar actividades en primera instancia son los trabajadores del aparato productivo, para recién paralizar las labores escolares.
“Nuestras federaciones nos han puesto como condición de que debe primero detenerse el aparato productivo, eso quiere decir que los mineros, fabriles y toda la clase obrera debe paralizar, para luego sumarnos nosotros como servicios”, explicó a Oxígeno.
La COB declaró un paro de 72 con el objetivo de presionar al Gobierno por un incremento salarial que esté por encima del 8 por ciento que ofreció el Ejecutivo, por la abrogación del Decreto Supremo 1126 que extiende la jornada laboral de seis a ocho horas lo que es rechazado tanto por trabajadores en salud y médicos, entre otros puntos que tiene el pliego de los trabajadores.
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