La dinamita y los gases son los más dañinos

El otorrinolaringólogo Omar Escobar aseguró que las dinamitas y los gases lacrimógenos usados para protestar o reprimir las marchas son los artefactos más dañinos a los que se expone la ciudadanía en medio de una medida de protesta.

Agregó además que las explosiones de los cachorros de dinamita usados habitualmente pueden generar problemas auditivos de manera inmediata o a largo plazo, mientras que con la inhalación de gas lacrimógeno se crea un alto daño al cuerpo en ese instante, pudiendo generar un espasmo en la laringe causando una sofocación y una asfixia.

“Por ejemplo, en la pasada semana hemos visto un uso excesivo de los agentes químicos, siendo este gas lacrimógeno mucho más nocivo que los petarnos y hasta las dinamitas porque es capaz de producir un espasmo que puede generar asfixia en cualquiera que se encuentra expuesto en el lugar. Lo que pasa es que se produce el cierre de la glotis (abertura anterior de la laringe), provocando arcadas, vómitos y finalmente la asfixia de la personas en caso de que sean alérgicos o si no se actúa de manera inmediata”, advirtió el entrevistado.

“Al ser un gas tóxico, es difícil que humanamente las personas aguanten, por lo tanto, en muchos de los casos las personas si no se alejan del lugar pueden llegar a asfixiarse y de no ser atendidos pueden llegar a fallecer. Por lo tanto, es mucho más peligroso el agente químico utilizado por los policías que el uso de petardos o hasta las dinamitas, por ser hondas explosivas inmediatas que pueden explotar al aire o en el suelo, mientras que la inhalación de un químico es más peligroso”, agregó.