El alcalde Luis Revilla aclaró ayer que la Alcaldía no tiene competencia para controlar el precio del pan de batalla y que sus atribuciones se limitan a garantizar el peso y la calidad del producto.
“No corresponde a la Alcaldía controlar el precio del pan, porque las políticas de importación de harina o de subvención de este producto, no las maneja el Gobierno Municipal, las maneja el Gobierno Nacional. Nosotros no podríamos manejar el precio”, aclaró.
Asimismo, dijo que instruyó a la Intendencia Municipal a realizar controles del peso y la calidad del pan de batalla en los centros de abasto, tiendas y puntos de venta al por mayor en los siete macrodistritos del municipio de La Paz.
El lunes por la madrugada, personal de la Intendencia controló el peso y la calidad del pan ofrecido en los mercados Rodríguez, Villa Fátima, Sopocachi, plaza 27 de Mayo, calle Zoilo Flores, Cementerio y otros de 66 puntos de venta mayor.
El intendente Mauricio Ruiz informó que el operativo de control de la marraqueta sin manteca arrancó la anterior semana con el control en hornos y esta semana en puntos de distribución mayor. Se verificó que el peso del pan y la inocuidad alimentaria en una gran mayoría de las panificadoras son adecuados.
“Mediante balanzas electrónicas hemos podido constatar que el peso de la marraqueta es superior a los 60 gramos. El dato es muy positivo, teniendo en cuenta que se tenía la amenaza del sector panificador de bajar el peso y el incremento del precios”, explicó.
Puntualizó que la Intendencia sólo realiza el control del pan de batalla, es decir de la marraqueta, sin manteca, y no así, las sarnitas, los cachitos, cuernitos, cachitos u otros que son panes especiales.
“Nosotros tenemos una ordenanza la 035/84 que especifica que el pan de batalla debe ser de 60 gramos. Los técnicos realizan el peso de 10 panes en la balanza electrónica, para hacer una media y verificar el peso. La verificación se realiza en cada punto de venta”, expresó.
Ruiz señaló que hasta la fecha se verificó la inocuidad alimentaria de 38 hornos, de los cuales, se notificó a 14 por falta menores y se suspendió preventivamente a tres por faltas graves. De los 66 puestos inspeccionados se notificó a seis por falta de uniforme.
En tanto, el principal dirigente de la Junta de Vecinos de La Paz, Fejuve La Paz , Arturo Quispe afirmó: “Nuestro rechazo absoluto (a la elevación del pan) porque es un pena que en estos momentos críticos quieran aprovecharse. Nosotros rechazamos y repúdianos está actitud, pese a tener la subvención del Gobierno Nacional en sus insumos. Vamos a convocar a las juntas vecinales para que en sus distritos tomen determinaciones”, dijo.
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