Días de golondrineo

Es típico que una vez concluida una temporada comience el “golondrineo de jugadores”; un movimiento que es súper interesante sobre todo para los medios y los hinchas, en el caso de estos últimos se entusiasman con el potencial que tendrá su equipo para los nuevos desafíos, en el caso de la prensa deportiva pasamos a ser presa fácil de dirigentes que nos dicen lo que les da la gana, unos con buenas intenciones pero manejando nombres en un abanico tan amplio de posibilidades que abarca desde un jugador nacional de regulares actuaciones hasta Zinedine Zidane, y otros tomándose alguna revancha de broncas escondidas para reírse un poco de la desesperación que se tiene en esta etapa de conseguir la primicia o la lista más cercana a la realidad que posteriormente presentan los dirigentes. Como cambiaron los tiempos…decían Los Enanitos Verdes; en la actualidad de una lista de 5 que un medio le pegue 3 ya es suficiente, como que los otros dos son aceptados en márgenes ridículos de especulación.

Algo de esto queda ratificado en una breve historia que me contaron mis compañeros en la redacción de EL DIARIO, un hombre vinculado a Bolivar afirmó que la dirigencia había renovado con Scaglia, por la tarde no nos cerraba que, estando “roto” (término durísimo pero que se utiliza en la jerga futbolera) haya sido el primero en firmar, a la nochecita insistimos con el tema y nos termina diciendo que, porque muchos colegas insistieron con el tema declaró eso, en realidad no hay nada todavía sobre nadie.

Seguramente para él será jocoso burlarse un poco de nuestro trabajo, lo que no valora es la pérdida de credibilidad, que es fundamental en el caminar por esta vida. Aparte también de burlarse de los lectores, oyentes o televidentes que en algún medio darán por hecho que esto sucedió. Si bien es responsabilidad nuestra ratificar o cruzar fuentes para confirmar o desechar una noticia, también uno confía en la buena voluntad de las personas que, siendo profesionales o interlocutores válidos son lo suficientemente maduros como para no jugar con tan valiosa información.

Le ruego preste atención esta época a los nombres y cifras que se manejan, se va a divertir bastante cuando nos acerquemos a la fecha de cierre del libro de pases. Otros dirigentes tendrán contacto permanente con los medios y por inexperiencia quedarán expuestos ante el vaivén de posibilidades que se dan en estas coyunturas. He sido testigo de operaciones que, estando concretadas con el jugador y su representante y todas las implicaciones como haber arreglado con su anterior club por cláusula de rescisión, prima con el futbolista, número de cuotas para la misma, sueldo, descuentos, pago de impuestos, vivienda, cantidad de pasajes a su país de residencia, pago de porcentajes de comisión del intermediario etc, etc, etc. Estando todo listo, a la esposa del jugador no le gusta la ciudad donde se trasladarían, no quiere o no puede mover a los chicos en época de colegio y el jugador prefiere (por su tranquilidad) no firmar y buscar otras opciones. Quién la había anunciado como hecha, queda en off side.

Los presidentes de las comisiones de fútbol y los que manejan la platita tienen hasta fines de junio para cerrar contratos, mientras tanto todo es una quimera.