Montevideo, (EFE).- Las asociaciones de defensores de los derechos humanos de Uruguay marcharán en silencio mañana como cada 20 de mayo desde 1996 por el centro de Montevideo para exigir “verdad y justicia” para los detenidos desaparecidos durante la dictadura (1973-1985).
Bajo el lema “Los vamos a encontrar. Por un futuro sin impunidad, verdad y justicia”, se espera que miles de ciudadanos anónimos, así como los familiares y amigos de las víctimas, marchen como ya es tradicional por la Avenida 18 de Julio de Montevideo, la principal arteria de la ciudad, portando velas y entre el silencio solo roto por la lectura de los nombres de las personas que aún siguen desaparecidas.
Esta decimoséptima marcha será la primera que se produzca después de que el Parlamento uruguayo aprobara en octubre pasado una ley que en la práctica anula la Ley de Caducidad, que impidió durante años juzgar los crímenes cometidos por policías y militares durante el período dictatorial, y se cumpliera así con uno de los pedidos más importantes para los defensores de los derechos humanos.
Además, la marcha también se dará tras un año en el que el hallazgo de los restos de dos desaparecidos, el maestro Julio Castro y el militante comunista Ricardo Blanco, que aparecieron enterrados en un cuartel militar, abrió nuevas esperanzas para saber del paradero del resto de los desaparecidos.