¡Ser hombrecito…es bien!

Gustavo Quinteros ayer por la mañana, en una presentación no programada ante los medios de comunicación, se presentó respondiendo a las interrogantes de periodistas que, evidentemente no son especialistas en materia de deportes, escuchar si Chile y Bolivia llegan presionados al partido del sábado a uno le provoca ataque de caspa.

Bolivia no ha ganado todavía ningún partido en esta eliminatoria y cuando jugó de local perdió. Lógico es que mucha presión tiene. Chile acelera el proceso de aclimatación con cámaras hiperbáricas e hipobáricas, la primera es capaz de aplicar grandes dosis de oxígeno a presiones superiores a la normal, esto permite a los atletas por ejemplo recuperarse del cansancio y, a nivel celular, reactivar todo el sistema sacando su máximo potencial; Bolívar el año pasado utilizó esta cámara para que varios de sus jugadores regeneren celularmente para evitar el cansancio causado por el trajín de partidos que tuvo por Libertadores y liga en Bolivia. La hipobárica simula el comportamiento de diferentes gases que conforman el oxígeno a distintas presiones barómétricas distintas a las que se manejan de manera normal, cuyos cambios se registran a diferentes altitudes;estas cámaras pueden simular altitudes de 30.000 metros sobre el nivel del mar para pilotos de combate en aviación militar o programarla a 3.600 mts. para futbolistas de la selección chilena de fútbol que jugarán en la ciudad de La Paz. Este sistema fue utilizado por primera vez por Juvenal Olmos aquel 2004 y le fue muy bien, ganó a Bolivia por 2 a 0, Marcelo Bielsa en el 2008 repitió victoria y gana en Miraflores por el mismo resultado, ya suman 12 los años que no se le gana a Chile en eliminatorias, en la segunda quincena del mes de Julio del 2000 le ganamos 1 a 0 y fue la última vez que sucedió esto.

Estos datos son anecdóticos, solo los utilizamos para refrescar un poco la memoria, la idea de esta nota es hablar de lo que creo, percibí de las declaraciones del D.T de Bolivia. Me dio la impresión de un Quinteros sin retórica, es decir, sin adornar lo que quería que quede claro en su discurso, en anteriores oportunidades medio que le daba vueltas a todas las respuestas que brindaba, en esta oportunidad fue mucho más claro, en un sinceramiento que creo necesitábamos todos, extemporáneo, pero necesario.

Convocó, y creo que desesperadamente en su interior, al público para alentar a los muchachos y que los chilenos sientan la presión, pues reconoció que la altura en esta ocasión y como viene ocurriendo hace bastante tiempo atrás, no será ventaja; que solo futbolísticamente se puede marcar alguna diferencia.

Está preocupado y no es para menos, tiene que definir si serán Martins y Pedriel los delanteros o Saucedo y Mojica que, entre ambos marcaron 30 goles el último torneo de la liga, hasta el momento por lo que sabemos, el problema de la efectividad sigue sin resolverse.