Alvarado: No se trabajó en soberanía alimentaria

Los alcances en cuanto a soberanía y seguridad alimentaria en Bolivia son mínimos, señala el analista económico Julio Alvarado.

“Seguridad Alimentaria con Soberanía”, fue el tema de la Cumbre Social Paralela a la 42 Asamblea General de la Organización de Estados Americanos (OEA) de Cochabamba.

Recordó que desde 2005 hasta el 2011 las cifras muestran que en esos años la importación de alimentos aumentó más de un 50%. “Si nos vamos a las estadísticas, Bolivia el año 2005 importaba 225 millones de dólares en alimentos, el año 2011 ha importado alrededor de 600 millones, en Bolivia cada vez se depende más de los alimentos importados”, explica.

De acuerdo al analista, la situación muestra que no se trabajó en materia de seguridad alimentaria, no se apoya a los productores y por lo tanto la dependencia de alimentos del extranjero es cada vez mayor. “Lo que se ha incrementado es la producción de coca y cocaína y con eso no nos alimentamos”, reflexionó.

Dijo que es fundamental el apoyo a pequeños, medianos y grandes productores de alimentos, además de la protección que puede brindarse a través del control para el ingreso desmedido de alimentos importados, que muchas veces responde a precios menores.

Al respecto, el director de la Coordinadora de Integración de Organizaciones Económicas Campesinas Indígenas y Originarias de Bolivia (Cioec), Luis Javier Valda,

señaló que para tener una seguridad alimentaria se debe apoyar a los productores, para que estos puedan solventar la demanda de la región.

Valda afirma que el Gobierno recién empieza a abordar el tema de seguridad alimentaria y por eso no existen grandes avances. Agregó que la concientización del consumidor, debe ser una política de Estado.

Actualmente el Estado boliviano toma medidas para tratar el tema, como el cierre de importaciones de papa a Perú, sin embargo para alcanzar una soberanía con seguridad

La soberanía alimentaria es un concepto que fue introducido con mayor énfasis en 1996 por Vía Campesina en Roma, con motivo de la Cumbre Mundial de la Alimentación de la Organización para la Alimentación y la Agricultura (FAO). Este concepto se entiende como la facultad de cada Estado para definir sus propias políticas agrarias y alimentarias de acuerdo a objetivos de desarrollo sostenible y seguridad alimentaria.