Asamblea con sólo dos presidentes y orientada por el Secretario de la OEA

La presencia de sólo dos presidentes y la ausencia de varios cancilleres deja la sensación que la 42 Asamblea de la OEA ha perdido otro peldaño en su jerarquía y puede ver restringido su radio de acción e incidencia en la región. Entre los ausentes está la secretaria de Estado norteamericana, Hillary Clinton.

“Nosotros siempre queremos que vayan todos los cancilleres, pero también depende mucho de lo que esté pasando con su agenda”, dijo el secretario General de la OEA, José Miguel Insulza, quien recordó que la jefa de la diplomacia estadounidense tiene otros temas como la negociación sobre el programa nuclear de Irán o “los problemas entre Afganistán y Pakistán”.

Se ha puesto en la agenda la revisión de las atribuciones de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, lo que implicaría un retroceso en la defensa de los derechos civiles.

Los analistas consideran que si se logra restar atribuciones a la Comisión de los Derechos Humanos, se habrá retrocedido décadas de un trabajo que ha permitido a la comunidad internacional actuar frente a los atropellos que un gobierno, un país o una organización pudiesen perpetrar actos en contra de los derechos humanos. Este documento lo habría preparado el propio José Miguel Insulza.

Las declaraciones del presidente del Ecuador, Rafael Correa culpando a una “prensa hostil y asfixiante” movió inmediatamente a los representantes de los medios de comunicación para responder a las apreciaciones a priori del mandatario ecuatoriano.

La ausencia de algunos presidentes y personalidades de América deja la mesa servida para incluir los temas conflictivos que ciertos líderes pregonan. Roberta Jacobson, encargada de América Latina en el Departamento de Estado, tiene la misión de aguantar los embates como el pedido del presidente Morales quien pidió cambiar la orientación de la OEA para dejar de servir al imperio.

Jacobson tendrá que aguantar el chaparrón en nombre de un Estado que siempre ha llevado la línea de la región.

La Cumbre Social que se desarrolla en paralelo a esta reunión alberga a movimientos sociales afines a los gobiernos que han copado estas reuniones y podrán dar la tónica en la resolución final.

Apenas han aparecido esporádicamente en Tiquipaya algunos dirigentes de la oposición, de manera que se eliminaron posibles fantasmas de protesta como los representantes de los territorios indígenas, a quienes Insulza recibió, pero también recibió a los de Conisur, de manera que, al equilibrar esta balanza quedó mejor parado ante Morales que ante los indígenas.