La novena marcha pasa Caranavi con tensión, resguardo y amenazas

Entre gritos y jalones, pobladores y colonizadores esperaban en el ingreso a Caranavi al grupo de personas que forman parte de la novena marcha en defensa del Territorio Indígena y Parque Nacional Isiboro Sécure (Tipnis). El norte paceño se dividió ante la presencia de los indígenas de Tierras Bajas y con la formación de un cordón humano de resguardo, los marchistas lograron pasar y evitar una lamentable confrontación.

El presidente de la Subcentral Tipnis, Fernando Vargas, quien al frente de la columna acompañaba a los cansados marchistas, agradeció la colaboración brindada por los pobladores de Caranavi y el apoyo a la defensa de la naturaleza.

Pasos atrás, estaba la dirigente Bertha Bejarano, quien con dos niños, uno en brazos y otro tomado de la mano, recorría el camino de ingreso del lugar.

La representante indígena hizo conocer a los pobladores de Caranavi su agradecimiento y dio a conocer la posición del Alcalde del lugar, quien dijo que los marchistas que se dirigían a plaza principal, no podrían asentarse para descansar como lo hicieron el año pasado.

Al aproximar el mediodía, un grupo de 70 colonizadores y cocaleros se apostaron en el ingreso a la población paceña de Caranavi con la finalidad de evitar el ingreso de los marchistas, argumentando que no serían bienvenidos al lugar. Sin embargo, a espaldas del conjunto de los colonos, se observaba que otros pobladores que viven en el sector, portando banderas blancas, comenzaban a organizarse, llevando consigo comida y algunos otros enceres que serían entregados a los marchistas.

Uno de los marchistas, miembro del Comité de Información, dio a conocer que un grupo de personas acompañados de niños se habrían adelantado a la marcha para ver cual era el panorama en Caranavi y para que los niños puedan alimentase.

Al promediar las 12:25 en las afueras de Caranavi, alertados por el estruendo de un petardo y los primeros gritos de protesta de las personas que pedían respeto a los pobladores y que dejen ingresar a los marchistas, comunarios y colonos comenzaron una disputa buscando cada uno hacer valer sus críticas.

En medio del disturbio, el dirigente Luis Acho, expresó que según la decisión del cien por cien de los colonos, se había determinado que los marchistas no ingresarán al lugar ni para descansar, menos pernoctar y que sólo se les permitiría pasarían por las afueras de la población.

A pocos metros se encontraba una mujer que con gritos pedía que se deje ingresar a los marchistas, considerando que son personas como ellos y que como madre no podía darles la espalda a mujeres que llegarían acompañadas de sus hijos.

Poco después, al ver que las cosas comenzaban a tomar mayor cuerpo, con tonos de voz elevadas y jalones entre las personas que buscaban despejar el ingreso, se hicieron presentes en el lugar ocho oficiales de la Policía, quienes parados frente a los colonos procuraban colocar orden mientras los pobladores de Caranavi pedían retirar a los colonos.

Después de unos minutos y con los ánimos más tranquilos los pobladores de Caranavi decidieron que para evitar posibles enfrentamientos, conformarían una escolta humana, asegurando que los marchistas puedan ingresar a la población sin mayores tropiezos o enfrentamientos a través de un desvío, perimiéndoles de esta manera que puedan alimentarse en el lugar y descansar.

La tensión pasó luego de las 16 horas y la novena marcha ahora se encuentra avanzando hacia la ciudad de La Paz, previéndose su llegada para la siguiente semana.

Como dato final, una mujer indígena de la marcha dio a luz a las pocas horas de ser trasladada al centro médico de Caranavi, con su bebé son tres nuevas vidas que llegaron en medio de la movilización.

DATOS

* Columna de marchistas llegó a mediodía hasta el ingreso a Caranavi.

* Colonizadores amenazaron con obstruir el paso levantando piedras y palos.

* Pobladores convocaron a formar un cordón humano de seguridad. Motocicletas fueron la escolta vecinal para transitar la localidad del norte paceño.

* Un kilómetro fue el tramo para el ingreso a la población cafetalera.