Asilo, refugio o exilio tienen una connotación distinta

El excanciller boliviano, Armando Loayza, explicó las diferencias existentes entre las figuras de asilo político, refugio y exilio, cuya connotación es distinta y responden a situaciones individuales en cada caso.

El jefe de bancada y senador por Convergencia Nacional (CN), Roger Pinto, solicitó el mes de mayo asilo político al país vecino, Brasil, bajo el argumento de sufrir persecución política a causa del Gobierno de Evo Morales.

Ante esta solicitud, autoridades gubernamentales señalaron que la postura de la Embajada brasileña, no es clara, debido a que no se especifica si el pedido del legislador de oposición es referente a asilo o refugio político.

En este marco, Loayza explicó que el término correcto para la solicitud de Pinto, es “asilo diplomático”, el cual se da el solicitante o “afectado”, realiza la petición a la Cancillería del país de destino y será ésta la instancia que defina si se le otorga el asilo con todos sus beneficios, incluyendo la protección extranjera, lo que permite al solicitante no ser detenido ni enjuiciado.

“El Gobierno boliviano puede alegar que esa persona básicamente tiene juicios en el país, por delitos comunes, pero el país que otorgue el asilo, en este caso Brasil, tiene un derecho indiscutible de calificar la información entregada y en base a ello ver si da el asilo o no y Bolivia una vez se apruebe el asilo tiene que dar el salvoconducto sin mayor protesta ni obstáculos”, expresó.

Asimismo, aclaró que el refugio político, es una figura distinta, debido a que consolida cuando quien hace la petición, se en encuentra en el país al cual solicita la ayuda correspondiente.

“En este caso el senador Pinto tendría que encontrarse ya en Brasil. El refugio político es cuando yo aparezco por ejemplo en Argentina y le pido refugio a la República de Argentina, argumentando los motivos, como persecución u otros”, dijo.

Finalmente, el término exilio, se utiliza para describir la situación de una persona que sale del país voluntariamente para residir en otro Estado, al sentir que no existe seguridad en su país de origen, según explicó.

“Por ejemplo en las revoluciones era muy común que varias personas para no ser presos políticos, buscaban estar en el exilio”, señaló.