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La Universidad de Chile viajó ayer a Buenos Aires confiada en sus medios futbolísticos parta enfrentar mañana a Boca Juniors, en la ida de las semifinales por la Copa Libertadores y con dos jugadores en duda por problemas físicos.

“En lo grupal vamos a salir a atacar, a hacer nuestro juego y en la cancha veremos quién es el más fuerte”, comentó en el aeropuerto de Santiago el juvenil delantero Ángelo Henríquez, que podría partir pronto al Manchester United, que maneja una opción de compra de su ficha.

El técnico argentino de la U, Jorge Sampaoli, está esperanzado en la recuperación de los dos titulares en duda: el central y capitán del equipo José Rojas y el media punta Gustavo Lorenzetti, también argentino.

Rojas sufrió un pequeño desgarro miofacial en el isquiotibial izquierdo el pasado sábado en Puerto La Cruz, durante el partido que la selección de Chile ganó a Venezuela (0-2), en el clasificatorio al Mundial de Brasil 2014.

Lorenzetti, en tanto, está afectado por dolores lumbares y la condición de ambos se despejará hoy, en un entrenamiento que la escuadra universitaria cumplirá en la cancha del Arsenal de Sarandí.

Si Rojas no puede jugar, en su puesto estará el juvenil Igor Lichnovsy, mientras en el caso de Lorenzetti el sustituto sería su compañero Guillermo Marino o Emilio Hernández.

En ese contexto, la “U” podría comenzar el partido en La Bombonera con Johnny Herrera; Osvaldo González, Albert Acevedo, José Rojas; Matías Rodríguez, Charles Aránguiz, Marcelo Díaz, Eugenio Mena; Gustavo Lorenzetti, Ángelo Henríquez y Junior Fernandes.