Gobernador de Chuquisaca decide retirar a las Siervas de María de la gestión de dos hospitales

Sucre, (Oxígeno).- El gobernador de Chuquisaca, Esteban Urquizu Cuellar, ha decidido que la congregación de las “Siervas de María” deje de administrar los hospitales públicos Santa Bárbara y San Pedro Claver que funcionan en el centro y en los barrios alejados de Sucre, en los que trabajan desde 1899.

Según la determinación de la Gobernación de Chuquisaca, la Comunidad “Siervas de María” deberán atenerse a un nuevo convenio que ha definido el traspaso de la administración de esos nosocomios a la Gobernación de Chuquisaca.

“El Gobernador nos han citado a una reunión, a gritos nos ha tratado mal, no nos ha dejado hablar, no ha acusado de discriminación, pero no supo explicar que significa eso”, expuso la madre superiora provincial de la orden “Siervas de María, sor Verónica Romero Uzaeta.

La raíz de la tensión en contra de las católicas, es un error administrativo que cometió una responsable del personal al descuidar el registro de un médico que realizaba una especialidad en el exterior del país.

Esteban Urquizu aclaró, que no está en contra de la organización religiosa y, para probarlo, incluso, se declaró públicamente “católico”. “En ningún momento el Gobierno Departamental está en contra de ellas. Yo soy católico. Y se lo dije al Monseñor (Jesús Pérez): soy católico”, confesó.

La superiora de la congregación que tiene su residencia en Argentina, ha citado el evangelio de San Lucas (9,1-6): “… y si en algún pueblo no los reciben, salgan de ahí y sacúdanse el polvo de los pies en señal de acusación”, en clara alusión a que están dispuestas a dejar el voluntariado en su carisma dedicada a los enfermos.

“Nosotras no queremos irnos, pero nos han puesto la cosa muy difícil, nos han atropellado”, remarcó.

Las siervas de María financiaron la construcción de hospitales, hogares, alcantarillados, caminos para facilitar la comunicación a los centros de atención médica.

Anualmente, las devotas organizan un bazar de caridad para cubrir los gastos de ropa para vestir a bebes recién nacidos de familias pobres, también reúnen dinero para comprar frazadas, sábanas y pijamas para los enfermos, ítems que no contemplan los presupuestos públicos.

El convenio con la exprefectura las responsabiliza de cargos jerárquicos como la jefatura de personal, el gabinete de enfermeras y otros cargos que garanticen el funcionamiento del hospital de clínicas de Santa Bárbara de la capital.

El gobernado ha prohibido a las “Siervas de María” integrar el sindicato de salud e influir en la organización de los trabajadores del centro médico.

La comunidad de las Siervas de María llegó a Sucre para trabajar en el hospital Santa Bárbara en 1899, por convocatoria de las autoridades nacionales y ante el pedido de sectores de la sociedad de la capital.