Proyecto Mutún y sus proyecciones

Analizando el contrato firmado por el Gobierno con Jindal Steel Bolivia S.A, subsidiaria de la India Jindal Steel & Power Limited, para la explotación e industrialización del hierro del Mutún, parece que nuestras autoridades no estudiaron el mercado de exportación del hierro del Mutún, considerando la geopolítica del Brasil, que es el segundo productor de hierro en el mundo, asociado con la Empresa Río Tinto Zin, la primera en el mundo en la exportación de acero.

Esto significaría que el mercado para la exportación del hierro del Mutún y sus derivados tendría una seria y difícil competencia para llegar a mercados de Europa u otros localizados a grandes distancias, lo cual sugiere proponer al Brasil la entrega de hierro del Mutún a cambio de acciones de la Empresa Siderúrgica de Corumbá.

Asimismo, renegociar el acta firmado entre Bolivia y Brasil en 1973, basado en que Bolivia cuente con una siderúrgica propia, para que el Brasil reciba, en tiempo y condiciones negociables, de cincuenta a cien mil toneladas de laminados.

Para la explotación e industrialización del Mutún, debemos contar con agua suficiente para atender las demandas en los procesos de explotación e industrialización, complementados con energía y transporte.

La solución a estos tres elementos básicos se detalla en forma técnica y económica, en el libro “Proyecto corredor fluvial boliviano Mutún-Atlántico” (Antonio Bazoberry Q.), publicado en marzo 2011 por Editorial Plural.

Con la construcción de un canal artificial desde el Mutún hasta el río Paraguay (120 Km.) se solucionaría el problema de transporte Mutún-Hidrovía Paraguay Paraná para acceder a los mercados de la Cuenca del Plata y mercados en el océano Atlántico con base en Puerto Nueva Palmira del Uruguay, país con el cual ya existen acuerdos para que Bolivia tenga facilidades portuarias, con depósitos y sistemas para el trasbordo de carga a barcos trasatlánticos.

En cuanto a la disponibilidad de agua para actividades mineras, el canal fluvial cuenta con el volumen necesario que ingresa del río Paraguay por vasos comunicantes.

El gas boliviano cubriría las necesidades de energía en el proyecto Mutún. Para el transporte de hierro se dispondría de un puerto localizado en las cercanías de los yacimientos de hierro y manganeso, que ofrece todas las facilidades portuarias, para la carga y descarga de hierro, productos agropecuarios de Santa Cruz y carga general por territorio boliviano.

Asimismo, el puerto Mutún serviría para la relocalización de puerto Aguirre, puerto Quijarro y puerto Gravetal, localizados a lo largo del Canal Tamengo.

Haciendo un cálculo de transporte de carga general, obtenemos que el transporte por vía fluvial sería de 14,00 US$/ton. por ferrocarril 35,00 US$/ton. y por carretera 45,00 US$/ton.

El proyecto corredor fluvial boliviano para la fuerza Naval es de gran importancia, considerando que le permite operar en el corredor fluvial Mutún Hidrovía Paraguay-Paraná, navegar a lo largo del Río Paraguay pasando por Asunción (Paraguay), Buenos Aires (Argentina), Río Mar del Plata y Montevideo (Uruguay), con posibilidades de ingresar al Océano Atlántico.

Además, la Fuerza Naval Boliviana dispondría de amplios espacios para construir astilleros y cuarteles.

Los justificativos técnicos, económicos, geográficos y geopolíticos para elaborar el proyecto Corredor fluvial boliviano Mutún-Atlántico se basan en numerosos antecedentes, de los cuales se destaca la solución de exportar por el Atlántico, prescindiendo de puertos chilenos, aprovechando las facilidades geográficas e hidráulicas existentes en la provincia Germán Busch (Santa Cruz).

En resumen, el proyecto Corredor fluvial boliviano Mutún-Atlántico constituye el Corredor bioceánico Atlántico-Pacífico.

El autor es Ing. Civil – Militar, Ing. Ambientalista Certificado y ex miembro del BID.

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