Algunos empleados tienen más de 20 años de antigüedad
Mientras no se concrete la firma del contrato de alquiler de las fábricas, persiste la incertidumbre.
La Confederación de Trabajadores Fabriles, demandó ayer al Gobierno garantizar la estabilidad laboral de los trabajadores de la Empresa América Textiles S.A. (Ametex), sin importar que sea la actual administración o el Estado quien asuma la responsabilidad del pago de los beneficios sociales a todos los trabajadores.
El máximo dirigente del sector, Ángel Asturizaga, señaló que la entidad coordina con el Sindicato de Trabajadores de Ametex la solución inmediata a la situación de inestabilidad, para evitar que los 1.725 trabajadores se queden sin fuentes de empleo y más bien sean recontratados en la nueva Empresa Nacional de Textiles (Enatex), tal como anunció la ministra de Desarrollo Productivo, Teresa Morales.
“El Gobierno tiene que dar una respuesta de qué se hará con esos compañeros, como se liquidarán los beneficios sociales y cual será la nueva forma de recontratación de los trabajadores porque no liquidándolos quedarán en la calle, lo importante es garantizar su estabilidad laboral y que se queden en la empresa, pero hasta el momento no hay una repuesta”, afirmó.
Explicó que al momento la situación del pago de los beneficios sociales es “incierta”, toda vez que no se resolvió la situación de los obreros que trabajan en muchos casos, más de 20 años.
“¿Qué pasara con aquellos compañeros que trabajaron más de 20 o 25 años en la fábrica? No hay una respuesta escrita menos una reunión de la Ministra Morales con los sindicatos”, cuestionó.
Para el dirigente la decisión del Gobierno de intervenir en la empresa textilera, fue acertada e inmediata para los trabajadores, sin embargo, cuestionó la demora en la resolución del conflicto, luego que el empresario Marcos Iberkleid, rechazara la propuesta de alquiler de 12.000 dólares que ofreció el Gobierno por las cinco fábricas del consorcio Ametex.
En ese contexto, dijo que la Confederación de Fabriles velará por la estabilidad laboral y el respeto a las fuentes de empleo de los trabajadores.
La empresa era la más grande del país, hasta que el Gobierno debido a su política económica, perdió los beneficios de la Ley de Preferencias Arancelarias Andinas y Erradicación de Drogas (Atpdea, por siglas en inglés), con Estados Unidos, el principal mercado de textiles bolivianos.
El Estado afirma que las exportaciones a mercados venezolanos, en apegó a un acuerdo comercial suscrito con los países de la Alternativa Bolivariana para las Américas y el Tratado Comercial de los Pueblos (ALBA-TCP) aumentaron las ganancias de Ametex en 42,46 millones de bolivianos en 2010 y en 48,00 millones en 2011.
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