Marchistas retrasan su ingreso a La Paz para evitar agudizar el conflicto policial

Los representantes de la novena marcha del Tipnis analizan la posibilidad de retrasar su arribo a la Sede de Gobierno debido al conflicto suscitado entre la Policía Nacional y el Ejecutivo. Por otro lado, observaron que el Gobierno extiende el tiempo de solución de esta controversia para lograr que la movilización indígena pase desapercibida.

El diputado indígena y líder de la novena marcha indígena, Pedro Nuny confirmó a EL DIARIO, que la movilización indígena no ingresará a la ciudad de La Paz hoy martes como estaba previsto y que esperará hasta mañana miércoles para ingresar a la plaza Murillo.

“Tomamos esta determinación por los motines policiales, que en cierta forma apoyamos, pero ante la inminente radicalización de este tema, consideramos permanecer en Urujara, el miércoles estaríamos ingresando a La Paz. Esperaremos a que se solucione este problema”, señaló.

En caso de que el conflicto se extienda por más días, las bases de la columna indígena analizarán si permanecen más jornadas en la tranca de Urujara para evitar que la controversia se profundice y perjudique a los indígenas de Tierras Bajas, afirmó.

“Nosotros no vamos a volver a nuestras comunidades sin ninguna respuesta, estamos dispuestos a mantenernos en La Paz, los días que sean necesarios, una vez que lleguemos”, añadió Nuny.

Por su parte, el presidente de la Sub Central del Tipnis, Fernando Vargas, acusó al Ejecutivo de “extender innecesariamente” el tiempo para dar una solución definitiva al conflicto, accionar que tendría el objetivo de gestionar un “autogolpe de Estado”, ante la incapacidad de solucionar las demandas de los policías que se encuentran amotinados desde el pasado 21 de junio.

“El mismo Gobierno se está preparando un autogolpe por la falta de capacidad que tiene para gobernar el país y poder victimizarse, nosotros no tenemos nada que ver (con el motín policial), rechazamos rotundamente las declaraciones sobre una posible ligación a la Policía”, manifestó Vargas.

De acuerdo con la Fundación Tierra, el presidente de la Confederación de Pueblos Indígenas de Bolivia (Cidob), Adolfo Chávez se encuentra resfriado, situación que le impide liderar la movilización indígena, por lo que se limita a marchar en las filas centrales de la columna.

Chávez, recordó a los comunarios que este movimiento no tiene intención alguna de desestabilizar al actual Gobierno ni sumar fuerzas al motín policial.

“La demanda de la Policía tiene más de 12 años de antigüedad. Nosotros los indígenas por tercer año consecutivo exigimos el respeto a nuestros territorios. El Gobierno provoca una acumulación de demandas, es irresponsable que se hable de un golpe de Estado, eso es jugar con fuego”, afirmó.

La columna indígena llegó a la tranca de Urujara, ayer al atardecer y fueron recibidos por las vendedoras del lugar con aplausos y la colaboración de familias que les ofrecieron mates calientes y pan. El cielo se encontraba despejado aunque el frío helado obligó a la mayoría de los marchistas a refugiarse en las carpas armadas a la intemperie. El médico Fabián Conde habría ordenado la evacuación de tres niños y un adulto, que tendrían riesgo de padecer neumonía.

Asimismo, pese a las donaciones que recibieron, aun falta carpas, ponchillos para la lluvia, ropa de invierno para los niños y ancianos, como también la alimentación.